MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Ya son dos oficinas ciudadanas –una en Lavapiés y otra en la calle Peñuelas, en Arganzuela– las que están haciendo frente a una nebulosa de entre 13.500 viviendas de uso turístico (VUT), según datos del Ayuntamiento, y 25.000 anuncios en los distintos portales, de las que ni el 7 por ciento cuentan con licencia municipal.
La Oficina de Afectados por las Viviendas de Uso Turístico, con sede en la Asociación Vecinal La Corrala, en el 38 de la calle Lavapiés, echó a andar en octubre. Ante la expansión del problema más allá del distrito Centro, la iniciativa vecinal ha inaugurado esta misma semana una segunda ‘antena’ ciudadana en el Ateneo La Maliciosa, en el número 12 de la calle Peñuelas, en Arganzuela, con el empuje de las asociaciones vecinales Pasillo Verde Imperial y Delicias Para Todos/as.
Se presentan como dos herramientas de “autodefensa ciudadana” ante la “inacción de las administraciones”, gestionadas de forma voluntaria por damnificados y miembros de las asociaciones vecinales de los barrios más afectados.
Asesoran sobre las acciones que pueden tomar las comunidades de propietarios, facilitan modelos de escritos de queja y demanda e informan de que, por ejemplo, el Real Decreto-ley 7/2019 de medidas urgentes en materia de vivienda y alquiler permite a las vecindades impedir la implantación de nuevos pisos turísticos en sus inmuebles e incrementar las cuotas que pagan sus propietarios.
Desde la oficina de Arganzuela –atiende presencialmente los miércoles alternos de 18.30 a 20.30 horas y organiza citas a través del 633 839 460– asesorarán en los casos de distritos cercanos como Carabanchel, Usera y Latina.
“Esto ya no es sólo una cosa del centro. Se ha desbordado”, describía Víctor Rey, uno de los portavoces de la oficina vecinal de Lavapiés en declaraciones a Europa Press. Ruido, trasiego de personas desconocidas a deshoras, uso intensivo cuando no inadecuado de los espacios comunes de los edificios (los portales como almacenes de maletas), suciedad, inseguridad por el descontrol de copias de llaves del portal… la explosión de los pisos turísticos ilegales va de norte a sur y de este a oeste de Madrid, “de Villaverde a Barajas”.
¿Qué tiene en común la explosión de pisos turísticos en General Ricardos (Carabanchel) y Nueva Numancia (Puente de Vallecas)? “El Metro”, identificaba Víctor Rey. La razón es que los pisos turísticos tienen conexión con la conexión que ofrece el suburbano, lo que permite llegar al centro en pocos minutos. “Todo esto es una ola desbordándose y no para de crecer”, advertía.
NI UN 7% CON LICENCIA MUNICIPAL
Según datos del Ayuntamiento de Madrid, en la capital operan 14.699 establecimientos turísticos: el 92%, es decir, 13.502, son viviendas de uso turístico. Sólo 941 de ellas, un escaso 6,9%, cuenta con licencia municipal, con otras 151 están en tramitación.
La capital registra un total de 158.756 plazas ofertadas en todos los alojamientos turísticos: el 30%, 47.589, se localizan en VUT. El resto se distribuyen entre 320 hoteles, 473 pensiones y hostales, 130 apartamentos turísticos, catorce hoteles-apartamentos y 260 establecimientos que engloban casas de huéspedes, hostels y albergues.
El alcalde, José Luis Martínez-Almeida, y el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, presentaban esta misma semana un plan de acción, anunciado desde hace meses, ante el incremento de las VUT un 41 por ciento desde 2017, según datos aportados por el Consistorio, con 5.564 nuevas.
Suspensión temporal con carácter inmediato de las nuevas licencias para VUT, endurecimiento del régimen sancionador, publicación del listado de pisos turísticos con licencia a través de una web que podría estar lista en mayo y refuerzo de la inspección con un 15 por ciento más de profesionales son las columnas vertebrales del plan de acción pilotado por Almeida y Carabante.
“PARCHE” Y “PROPAGANDA”
Desde la izquierda, en la oposición en el Ayuntamiento, han cuestionado el plan de acción. “Parche” y “propaganda” fueron los calificativos empleados para describir la iniciativa municipal, con el foco puesto en la necesidad de cerrar las viviendas ilegales, precisamente en la misma semana en la que se ha conocido que el expediente de las 27 viviendas de la céntrica plaza de Conde de Miranda ha sido archivado por la Agencia de Actividades después de que la Policía Municipal girara visita y acreditara que no se estaba prestando el servicio, trasladaba Carabante.
Los colectivos ciudadanos vienen denunciando que, a pesar de que la aplastante mayoría de los pisos turísticos de la capital son ilegales por carecer de una licencia de actividad adecuada, el Ayuntamiento ha cerrado hasta la fecha “un número irrisorio”. “Lejos de aplicar la normativa, el Ayuntamiento no hace nada, ha huido de esta situación”, se lamentan desde la oficina ciudadana de Lavapiés.
El propio delegado detallaba en el Pleno de marzo que las 4.093 inspecciones del Ayuntamiento de Madrid se habían saldado con la detección de 478 viviendas turísticas sin licencia mientras que otras 243 habían recuperado su uso original en los últimos años.
- Te recomendamos -