Carnero destaca que en abril de 2023, antes del cambio de gobierno, el personal temporal representaba un 20% de la plantilla del Ayuntamiento
VALLADOLID, 14 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Valladolid ha dado por finalizado este martes el proceso de estabilización del personal temporal, con el capítulo dedicado al personal laboral, en un acto en el que han firmado sus nuevos contratos un total de 186 trabajadores, lo que sitúa la tasa de temporalidad estructural correspondiente a estos empelados en un 6,48 por ciento.
El acto ha estado presidido por el alcalde de Valladolid, el ‘popular’ Jesús Julio Carnero, acompañado por el concejal de Hacienda, Personal y Modernización Administrativa, Francisco Blanco, y el edil de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, área a la que pertenece buena parte de los empleados incluidos en la convocatoria de estabilización.
El regidor vallisoletano ha destacado que estas contrataciones sitúan la tasa de temporalidad estructural correspondiente a estos empleados en un 6,48 por ciento, una cifra inferior al 8 por ciento, que es el objetivo para el conjunto de las Administraciones Públicas españolas marcado en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia evaluado por la Comisión Europea.
De hecho, Carnero ha destacado que el Ayuntamiento de Valladolid inició el proceso en abril de 2023 –en los meses finales del anterior equipo de Gobierno formado por PSOE y VTLP– con una tasa de temporalidad “superior al 20 por ciento”, de forma que ha destacado que “este logro muestra el compromiso del Consistorio vallisoletano con la mejora de las condiciones de empleo en el ámbito público”.
Carnero y Blanco han firmado los 186 contratos laborales correspondientes a las personas que han superado los procesos selectivos para el acceso a un puesto de trabajo estable en la administración municipal. En el acto han estado buena parte de los trabajadores, así como personal municipal y los portavoces de los grupos municipales de PSOE, Pedro Herrero, y VTLP, Rocío Anguita.
Carnero ha recalcado que se trata de un día “importante para todo lo que supone el servicio público, la vocación de servidores públicos tanto de funcionarios como del personal laboral del ayuntamiento de Valladolid”.
Por ello ha querido agradecer el “trabajo, dedicación y esfuerzo” del departamento de Recursos Humanos del Consistorio para lograr la culminación de este proceso que considera que contribuirá a “una mejora de las condiciones de vida de todos y cada uno de los vecinos y vecinas de la ciudad de Valladolid”.
A su vez, el alcalde ha agradecido el apoyo dispensado por los representantes de los trabajadores por la colaboración “de todas las partes”.
En julio de 2024, tuvo lugar la toma de posesión de 144 funcionarios a los que se une ahora la formalización de 186 contratos de personal laboral, con lo que termina así el proceso de estabilización del personal temporal. Fuentes municipales han añadido que el proceso ha sido “extremadamente complejo, ha requerido un trabajo exhaustivo coordinado por la Concejalía de Hacienda, Personal y Modernización Administrativa”.
CRÍTICAS DEL PSOE
Ante las críticas planteadas por el Grupo Municipal Socialista sobre el supuesto “retraso” en la culminación del proceso de estabilización, Carnero ha recordado que el anterior equipo de Gobierno fue el que “estableció las reglas” de este proceso y que lo hizo en abril de 2023 “in extremis, agotando el mandato municipal” que concluía en mayo de ese año.
El regidor ha querido defender el “compromiso claro y evidente” de su equipo de Gobierno con el descenso de las ratios de temporalidad y ha reiterado que durante su etapa en el Consistorio éstas han bajado del 20 al 6,5 por ciento.
TRASLADOS.
De forma paralela, mediante un acuerdo con la parte social, se han llevado a cabo diversos concursos de traslados, garantizando los derechos de todos los trabajadores y respetando los principios de igualdad, mérito, y capacidad. Este enfoque ha permitido dar cumplimiento a la normativa vigente, al tiempo que se han sentado las bases para una plantilla más sólida y eficiente, que redundará en la cantidad y calidad de los servicios públicos municipales.
La formalización de estos contratos, precisan fuentes municipales, “no solo beneficia a los empleados públicos, sino que también tiene un impacto positivo, tal y como se ha señalado anteriormente, en el servicio público, al asegurar que quienes desempeñan funciones esenciales tengan estabilidad y, por lo tanto, la posibilidad de desarrollar una carrera profesional a largo plazo.
Esto reduce la rotación y permite una mejor continuidad en los proyectos y servicios que ofrecen las administraciones públicas.
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