La compañía tecnológica china OPPO está potenciando su actividad en el ámbito de la salud, a través de su laboratorio OPPO Fitness Health Lab, una de las mayores plataformas profesionales de investigación sobre salud deportiva del sur de China.
La multinacional comenzó a trabajar en este ámbito en 2019, con el objetivo de ofrecer a los usuarios de sus dispositivos soluciones de gestión de la salud a través de la tecnología. El laboratorio de salud de OPPO se instauró de manera oficial en 2021, junto con la creación de tres laboratorios físicos especializados en tres áreas de investigación: fitness, clínica y sueño. En ellos, se analizan cuestiones relacionadas con la salud cardiovascular, fitness, salud del sueño, salud mental y atención médica remota. El centro de investigación cuenta con un equipo de ingenieros expertos en investigación aplicada a la biomedicina, algoritmos, sensores, ciencia de datos y desarrollo de software y hardware.
En la actualidad, los resultados del laboratorio de OPPO están orientados a dos categorías. Por un lado, las tecnologías, incluyendo el diseño de algoritmos, sensores y modelado de datos y, por otro lado, la creación de productos innovadores basados en estas tecnologías de vanguardia, como el monitor de salud familiar OHealth H1, y algunas aplicaciones de salud que están disponibles en los smartwatches y smartphones que comercializa la compañía.
Asimismo, el OPPO Health Lab es también un centro de almacenamiento y análisis de datos. En él se recopilan más de un millón de datos de pruebas de salud reales, y ha logrado más de 100 patentes de invención. Esta recopilación se logra gracias a máquinas específicas que logran registrar datos deportivos básicos, para analizar factores como la postura, el consumo de oxígeno, la frecuencia cardiaca o el consumo de calorías.
Como ha indicado la compañía en un comunicado, a fin de proseguir con sus investigaciones en el campo de la salud, tienen previsto crear un nuevo laboratorio en la ciudad de Dongguan en 2024, que contará con más equipos profesionales de pruebas de salud y una mayor inversión en investigación básica y aplicada en la salud deportiva.
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