Ve fortaleza en Euskadi pero apela a la cautela por la coyuntura porque la crisis de Oriente Medio tiene consecuencias impredecibles y negativas
BILBAO, 12 (EUROPA PRESS)
El lehendakari, Iñigo Urkullu, asegura que Euskadi “responde bien” a los retos frente al discurso de algunos sectores En este sentido, señala que los indicadores de la economía vasca y los datos de empleo dan muestras de “fortaleza” y, aunque las expectativas son “positivas”, apela a la “cautela” ante la “fragilidad” de la situación internacional” y apunta que la nueva crisis de Oriente Medio tiene consecuencias “impredecibles”, pero “negativas en todo caso”.
En un artículo, publicado en el diario El Correo, señala que la ciudadanía vasca asiste desde el tiempo de la pandemia -“y con el objetivo puesto en todo proceso electoral que pudiera ser”- a un debate sobre la “fotografía real de Euskadi”.
En este sentido, señala que existe un discurso divulgado “con intensidad” por algunos sectores políticos, socio-económicos y mediáticos tanto dentro como fuera de Euskadi que presenta la radiografía de la realidad vasca “con rasgos realmente sombríos, catastrofistas”.
“No he ocultado, ni oculto mi preocupación y desacuerdo, tanto en la forma como en el fondo, con este modo de hacer política y tratar a la ciudadanía”, añade.
DATOS OBJETIVOS
Urkullu asegura que es el primero en reconocer que hay “problemas y dificultades”, que hay que “seguir mejorando” y en hacer “un ejercicio de autocrítica pública sin que haya servido de nada”. Subraya que también ha sido el primero en defender “la autoexigencia frente a cualquier forma de autocomplacencia o acomodación”. “Eso sí, con la verdad de los datos objetivos por delante”, agrega.
El lehendakari afirma que es importante entender el contexto actual porque se lleva 15 años “encadenando una crisis detrás de otra, todas de calado y carácter global, con una enorme repercusión en la sociedad”.
A ello, según apunta, han respondido con un “amplio abanico de medidas de apoyo social o económico y también humanitario”. Iñigo Urkullu señala que, a día de hoy y “a pesar de todo lo padecido”, los indicadores de la economía y los datos de empleo dan “muestras de resiliencia y resistencia, de fortaleza”.
Además, indica que las expectativas para este año y el siguiente “son positivas”, si bien precisa que hay que analizar esta realidad “con cautela ante la fragilidad de la situación internacional” y, en concreto, cita, la nueva crisis en Oriente Medio, una posibilidad que, según recuerda, apuntó en el Debate de Política General del pasado 14 de septiembre, y cuyas “consecuencias son todavía impredecibles pero negativas en todo caso”.
Iñigo Urkullu asegura que esta sucesión de crisis está caracterizada por “su impacto global” y prácticamente todos los países del mundo y, desde luego, todos los europeos han padecido “consecuencias similares”.
“No somos una isla, tampoco un ‘oasis’, tal y como se ha pretendido poner en mi boca”, añade el Lehendakari, que cita, como ejemplo, que las dificultades en los servicios de salud en Euskadi son “compartidos” en todo el entorno y se pregunta si “alguien lo reconoce”.
“Se da la paradoja de que alguien, después de afirmar que ‘la situación de Euskadi es desastrosa’, deberá admitir que no puede presentar ejemplos de países que pueden ofrecer un balance mejor”, manifiesta.
Según recuerda, los indicadores de ‘Euskadi 2013-2023’ muestran que se ha avanzado en los principales ámbitos de competividad y bienestar. Urkullu apunta que el PIB de Euskadi era de 64.900 millones de euros en 2013 y hoy es de 86.200 millones, la tasa de paro era del 16,6% y, en la actualidad, del 7,4%, con alrededor de un millón de personas cotizando.
Junto a ello, destaca otros datos como que en 2013 el gasto por persona en salud en Euskadi era de 2.700 euros y ahora 3.500 euros o el aumento del gasto por persona en protección social, de 7.900 euros hace diez años a los actuales 9.900.
También apunta que, en el ámbito educativo, Euskadi es la comunidad que “más invierte” con 1.426 euros por alumno o que la inversión en I+D+i se ha incrementado de forma continuada y alcanza el 2,11% del PIB, lo que “acerca” a Euskadi a la convergencia con Europa que puede producirse el próximo año.
Asimismo, subraya que la industria y los servicios avanzados han alcanzado el 40,8% del PIB o el hecho de que Euskadi se sitúe entre los siete primeros países europeos con mayor igual de género. También señala que la tasa de riesgo de pobreza se encuentra seis puntos por debajo de la media europea.
Además, en los últimos diez años se han logrado 11 nuevas competencias para Euskadi y, desde enero de 2020, se cuenta con “un compromiso aprobado” en el Consejo de ministros para el “cumplimiento íntegro” del Estatuto. También -añade- se han alcanzado acuerdos bilaterales con los diferentes Gobiernos españoles para actualizar y mejorar tanto la Ley del Concierto Económico como la Ley del Cupo.
“Esta es la fotografía real, objetivo y basada en datos. Un ejercicio honesto de compartir una ‘concepción de Euskadi basada en datos reales”, agrega Urkullu, que también subraya que los presupuestos vascos hace diez años no alcanzaban los 10.000 millones y la previsión para 2024 es poder contar con un presupuesto en el entorno de los 15.000 millones, “un 50% más de recursos públicos que hace una década”.
Urkullu afirma que el compromiso “prioritario” del Gobierno es seguir mejorando los servicios públicos esenciales, además de la generación de riqueza y empleo.
MIRADA HACIA 2040
Por otra parte, atendiendo a la cultura política vasca, asegura que no se conforma y trabajan con dos perspectivas complementarias, la Agenda 2030 y la visión de Euskadi 2040.
Según señala, Euskadi está alineada con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas y, de forma complementaria, impulsan Euskadi 2040, una “reflexión compartida” sobre el modelo para el País Vasco en el futuro.
“Nuestro objetivo es construir un modelo de bienestar sostenible e inclusivo. Nuestro norte es ambicionar una Euskadi 2040 situada entre las 30 primeras regiones europeas con mayor renta por habitante de las 320 existentes, seguir entre las regiones con menor tasa de pobreza, ser líder en innovación, situar nuestro país como territorios neutro en carbono y con un paro inferior al 6%”, asegura.
Además, afirma que van a seguir trabajando también por una Euskadi “con un estatus de autogobierno actualizado”. “Con capacidad para gestionar nuestras competencias y responder a los retos de futuro de nuestro país. Euskadi tiene problemas y dificultades como todos los países de nuestro entorno. Ahora bien, los datos objetivos reflejan que Euskadi está respondiendo adecuadamente a los retos que le han planteado las crisis sucesivas padecidas desde 2008”, señala
Por último, subraya que “hay trabajo por delante” para hacer frente a los retos como son ayudar a fortalecer la economía y generar empleo de calidad, luchar contra el cambio climático, conseguir la convergencia con Europa en innovación para ser competitivos, así como responder al reto demográfico, entre otros.
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