SAN SEBASTIÁN, 23 (EUROPA PRESS)
La empresa guipuzcoana Irizar ha sido adjudicataria del suministro al Ayuntamiento de San Sebastián de dos camiones eléctricos para la recogida de los residuos sólidos urbanos. La capital guipuzcoana se convierte así en la primera ciudad vasca en disponer de un camión “totalmente eléctrico” en su flota de recogida de la basura.
El concejal de Mantenimiento Urbano, Miguel Ángel Díez, ha explicado que se trata de camiones “100% eléctricos y de cero emisiones”, que llegarán a San Sebastián a finales del año 2023, ya que la empresa adjudicataria inicia ahora su fabricación.
Los camiones, con sistema de carga lateral de los contenedores, tienen 9,2 metros de longitud y están equipados con baterías de última generación con capacidad de 306,9 kWh, que aseguran energía para una jornada de trabajo completa. Están propulsados por un motor eléctrico de potencia máxima de 360 kW y disponen de una carga útil de hasta 9.140 kilos de residuos.
El responsable del proyecto “Irizar ie Truck”, Josu Letona, ha señalado que “por sus múltiples detalles, específicamente diseñados para operar en entornos urbanos, como la cabina del camión, las cero emisiones o el escaso nivel de ruido, el Irizar ie Truck es un vehículo idóneo para circular por ciudades y áreas metropolitanas, lo que contribuye a una ciudad más limpia, segura y un entorno más sostenible para la ciudadanía donostiarra”.
Díez ha apuntado que la adquisición de estos camiones “avanza en la apuesta del Consistorio donostiarra por una movilidad sostenible y respetuosa con el medio ambiente”. El pasado año el camión estuvo haciendo pruebas en la ciudad durante varias semanas con unos resultados “muy positivos”.
La cabina del camión ha sido especialmente diseñada para aplicaciones urbanas. Su capacidad es de cuatro personas con un escalón único, facilitando el acceso al vehículo. Dispone de una puerta neumática hacia el interior, garantizando así el movimiento de los operarios ante cualquier tipo de obstáculo en las calles.
Tanto la baja posición del asiento del conductor y la amplitud de las lunas delanteras y laterales permiten un amplio ángulo de visión sobre otros vehículos, ciclistas, peatones y usuarios.
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