BILBAO, 14 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Bilbao ha convocado un concurso de proyectos para convertir el Cementerio de Begoña en un nuevo espacio verde, de estancia y paseo, y “coherente con la memoria de su pasado”. De este modo, se pretende “encontrar la propuesta más idónea para abordar la intervención integral, arquitectónica e histórica” en una parcela de unos 6.150 metros cuadrados bordeada por diferente tipología de muros y cierres en sus laterales.
Según ha explicado el Consistorio, esta convocatoria llega tras la culminación del proyecto ‘Begoñako Argia’ llevado a cabo por la Sociedad de Ciencias Aranzadi, fruto del cual se han realizado aproximadamente 4.700 exhumaciones (casi cinco veces más de lo previsto inicialmente), y que ha dado lugar, entre otros hallazgos, al descubrimiento de la mayor fosa común de la Guerra Civil desenterrada en Euskadi hasta la fecha y de una fosa común de época carlista.
Por ello, ha señalado que “memoria e historia han de ser dos cuestiones fundamentales” en el diseño del futuro parque que se proyecta sobre el antiguo cementerio. En palabras del concejal de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos, Asier Abaunza, “estamos ante un gran reto: el del desarrollo de un proyecto de ciudad, singular y de alta sensibilidad social”.
“Hablamos de transformar el antiguo camposanto en un espacio verde de uso libre que sea capaz de aunar la memoria histórica, patrimonial, cultural y paisajística de la ciudad, y convertirse en un lugar atractivo donde entender la villa”, ha señalado.
El Ayuntamiento ha recurrido a la fórmula del concurso de proyectos con intervención de jurado para empezar a trabajar sobre esta cuestión.Los equipos que concurran deberán garantizar en sus proyectos aspectos como una solución arquitectónica e integración urbana en el entorno, atención a los valores naturales, culturales e históricos del lugar y a los criterios de sostenibilidad y eficiencia energética, adecuación e integración de usos y actividades, y otras cuestiones generales como la gestión inteligente del espacio, así como la viabilidad y sostenibilidad económicas.
INTEGRACIÓN URBANA
El Ayuntamiento ha explicado que uno de los objetivos fundamentales del concurso es la conversión del emplazamiento en un espacio verde de estancia y paseo, abierto al público en horario diurno y que se pueda cerrar en horario nocturno.
Esta actuación deberá basarse en “la generación de un espacio confortable, con una propuesta general de paisaje coherente donde la infraestructura verde adquiera un papel protagonista”. Asimismo, se deberá plantear “una propuesta clara de ordenación de los ámbitos”, en la que se compatibilice la distinción entre espacios estanciales, de encuentro o de tránsito “con la continuidad y homogeneidad de todo el conjunto”.
Se tendrá en cuenta también la estrategia de conexión y continuidad del parque con el entorno, especialmente con los accesos desde las calles circundantes, las de Elizalde, Bilintx y Virgen de Begoña.
También se contempla la recuperación e incremento del arbolado existente, sustituyendo solo aquellos ejemplares con problemas fitosanitarios o que puedan suponer riesgos para la seguridad, y su posible continuidad con los parques y jardines próximos.
Según han apuntado los responsables municipales, se valorarán las propuestas que introduzcan beneficios ambientales, que favorezcan la biodiversidad, la resiliencia y sus consecuencias favorables para el paisaje, la calidad del aire y la salud de las personas. También se tendrán en cuenta las que aporten “soluciones para la mejora del confort acústico y térmico, reduciendo el efecto de isla de calor”.
Deberá contemplarse, igualmente, la gestión eficiente de los recursos y el consumo mínimo de energía. De este modo, se puntuarán más aquellos proyectos que optimicen y minimicen el mantenimiento y conservación del espacio público, y “lo conjuguen con la puesta en valor del patrimonio arquitectónico y cultural del espacio”.
Las propuestas deberán definir los destinos y usos generales de los diferentes ámbitos, dependiendo de las potenciales personas usuarias y “la forma de relacionarse entre ellas y el entorno”. Así, tendrán que incluir un esquema de superficies y usos para explicar la funcionalidad de cada uno de los espacios, los recorridos entre ámbitos, y para el visionado del conjunto escultórico y el que albergará la edificación existente, “por ejemplo, la antigua capilla que se pretende recuperar con la finalidad de albergar y difundir los contenidos históricos y culturales del emplazamiento”.
Se valorará, además, que los usos propuestos tengan una función pedagógica para todos los públicos, con criterios de accesibilidad universal.
Por otro lado, los proyectos deberán definir el concepto del parque y del paisaje urbano que se propone, así como la conexión y los diferentes accesos. Se valorarán las aportaciones que contribuyan a una gestión “más inteligente del espacio” como tecnologías al servicios de la persona usuaria, sensores e instrumentos de control, tecnologías de comunicación y, además, la optimización económica de la propuesta y la minimización de costes, tanto del proyecto inicial, como del mantenimiento posterior”.
PREMIOS
Dada “la complejidad y la naturaleza multidisciplinar del proyecto”, los equipos participantes deberán estar compuestos, como mínimo, por un arquitecto, un historiador y un paisajista.
El concurso se publicará en los próximos días en el Perfil del Contratante del Ayuntamiento de Bilbao, junto a la documentación necesaria para la presentación de las ofertas. El plazo para presentar proposiciones comenzará con la aprobación del expediente en Junta de Gobierno, previsiblemente la semana que viene, y se prolongará durante dos meses.
El jurado estará compuesto por cinco personas con derecho a voto, el concejal Asier Abaunza, el arquitecto y director de Planificación Urbana Javier, Martínez Callejo, su antecesor en el cargo, Mikel Ocio, el arquitecto de la Sociedad de Ciencias Aranzadi Anartz Ormaza, que ha dirigido el trabajo de campo en el proyecto Begoñako Argia, y un representante del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro.
En un plazo máximo de seis meses desde la finalización del periodo hábil para la presentación de propuestas, se emitirá el fallo del jurado. El equipo que resulte ganador obtendrá 20.000 euros (IVA excluido), mientras que a los dos siguientes clasificados, por orden de puntuación, se les darán 6.000 euros (IVA excluido), respectivamente.
Además, el Ayuntamiento podrá adjudicar la redacción del proyecto de ejecución y dirección de las obras al equipo ganador del concurso, aunque se reserva asimismo el derecho de no iniciar la tramitación del procedimiento.
- Te recomendamos -