PAMPLONA, 14 (EUROPA PRESS)
Pamplona ha acogido este lunes la primera cita de los tres encuentros territoriales de mujeres rurales organizados por UAGN que se llevarán a cabo durante octubre, en distintos puntos de la Comunidad foral para “detectar necesidades, poner experiencias y visiones en común y crear red entre la parte femenina del sector”.
Ha tenido lugar casi un año después del primer evento de UAGN por la igualdad de oportunidades en el sector primario, en la víspera del Día Internacional de las Mujeres Rurales, y “siguiendo esa estrategia por la equidad en la que trabaja la organización agraria”. El 23 de octubre tendrá lugar otro en Tudela, y el 31 de octubre el tercero en Estella.
Se trata de reuniones dirigidas a un grupo reducido de mujeres con el fin de “generar un espacio íntimo, seguro y de confianza, en el que la dinámica de trabajo pueda concurrir más fácilmente” para “detectar necesidades, poner experiencias y visiones en común, conocerse unas a otras y crear una red de apoyo”.
Según ha explicado Begoña Liberal, agricultora de Orísoain, vicepresidenta de UAGN y vocal en Asaja Mujeres, “es la continuación de la estrategia por la igualdad en la que trabaja UAGN desde la renovación de los estatutos de la organización en el último Congreso de la organización, en marzo de 2023”.
“En noviembre de ese año realizamos la primera jornada dedicada a dicha temática y nos dimos cuenta de que la palabra que más se repetía entre las participantes era ‘soledad’. Así que queremos dar respuesta a ello generando redes, lazos, entre nosotras para conocernos o reconocernos y cuidarnos a través de dinámicas como la que hoy hemos realizado”, ha indicado.
En palabras de Leire Arteta, técnica de proyectos de Koine-Aequalitas, entidad responsable de la dinámica de trabajo realizada durante el encuentro, “queríamos identificar y trabajar, tanto a nivel colectivo como individual, qué necesita y qué puede aportar cada una a esa red y así poder ir creciendo juntas”.
“El resultado ha sido muy positivo, han salido cosas muy interesantes. La idea es que cuando finalicemos el ciclo de encuentros territoriales, recopilemos toda la información y que sirva para que esa red sea efectiva y siga ampliándose”, ha añadido.
Por su parte, Raquel García, técnica de proyectos en Koine-Aequalitas, ha remarcado que “un término común en los distintos sectores en los que nos toca hacer este tipo de dinámicas es el de la ‘conciliación'”. “También el de la ‘visibilidad’. Hemos visto que, de igual modo que sucede en otros oficios, en el agro, la figura de la mujer ha permanecido en la sombra. Hoy, aquí, se han plantado para dar un paso adelante y decir ‘aquí estamos también nosotras, formamos parte del sector y queremos que se nos vea, que se nos tenga en cuenta'”, ha subrayado.
Ana Elizalde, una de las participantes, ha afirmado que “ha sido muy ameno y enriquecedor”. “Hemos podido conocernos y descubrir problemáticas o inquietudes comunes desde las experiencias personales de cada una”, ha manifestado.
Además, ha apuntado que “hay una diferencia abismal entre la ciudad y el campo”. “Ser mujer condiciona, y también el vivir en un pueblo. Todo tiene su parte positiva y negativa, yo he elegido residir en un entorno rural, es lo que quiero; sin embargo, hay que admitir que la falta de servicios, el depender del coche, etc., supone una desventaja y, sobre todo, a la hora de conciliar se nota”, ha comentado.
EL FOCO EN LO RURAL
Begoña Liberal ha añadido que “igual no es tanto el género, sino que hay que poner el punto en lo rural”, pues “la dificultad es para todo el mundo”. En este sentido, ha apostado por dotar a los pueblos de infraestructuras y recursos “para que cualquier persona pueda desarrollarse y vivir allí en condiciones, porque a día de hoy no diría que sean poco atractivos, sino que son hostiles”.
“Fechas como la de mañana, el Día Internacional de las Mujeres Rurales, nos recuerdan lo que nosotras aportamos tanto a nuestros pueblos, donde hemos decidido vivir, como al resto de la sociedad a nivel social, cultural, económico, medioambiental. Nuestro oficio es esencial para que se mantenga el entorno rural, pero también aportamos todo ello al sistema socioeconómico de quienes viven en las urbes, somos parte de ese equilibrio y hay que ponerlo en valor”, ha trasladado.
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