MURCIA, 2 (EUROPA PRESS)
UGT ha mostrado su “preocupación” porque el paro regional creció en febrero “más que en ninguna otra comunidad” y por el hecho de que los colectivos más vulnerables “se ven excluidos de la mejora interanual de las cifras del paro”.
El sindicato ha considerado que la nueva Ley de Empleo “no ayudará a resolver unos problemas de paro estructural, especialmente graves” en la Región, y ha reclamado, asimismo, “mejoras de los derechos laborales y salariales de las personas trabajadoras para seguir reforzando la calidad del empleo”.
Según los datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, el número de personas paradas en la Región de Murcia se situó, en febrero, en 93.740 personas, cifra que supone un aumento del 1,72% respecto a enero y un descenso del 1,13% respecto a febrero de 2022.
Se trata de un aumento generalizado por colectivos y sectores. Sin embargo, UGT ha puntualizado que “no se trata de un aumento que se dé con la misma intensidad en todos ellos”, según informaron fuentes del sindicato en un comunicado.
Por lo que respecta a los colectivos, los menores de 25 años y los extranjeros son los que experimentan los mayores y más significativos incrementos relativos de sus cifras de paro. Se trata, además, de registros “coherentes con los de los sectores que más se ven afectados por el incremento intermensual del paro, la agricultura y el colectivo sin empleo anterior, en los que extranjeros y personas jóvenes tienen una representación muy cualificada”.
A UGT le “preocupa”, en cualquier caso, que este incremento intermensual del paro regional “sea, en términos relativos, el más alto registrado en España”.
En cuanto al descenso interanual del paro, aunque positivo, UGT lamenta que “se ve ensombrecido por el hecho de ser mucho menor al experimentado, de media, en el conjunto nacional y por tratarse de un descenso del que no participan los colectivos más vulnerables (jóvenes, extranjeros y mujeres), ya que estos ven incrementadas sus cifras de paro respecto al mismo mes del año pasado”.
Por otro lado, ha lamentado que las cifras de afiliación a la Seguridad Social, dadas a conocer también este jueves por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, “aunque aún registrando crecimiento positivo, continúan ralentizándose”.
Respecto a febrero de 2022 las afiliaciones se incrementan un 1,06% (en España, un 2,42%) y, en relación a enero, aumentan un 0,37%, alcanzándose una cifra total de personas afiliadas en la Región de 626.012.
A su juicio, “es evidente, a la vista de estos datos, que urge resolver los problemas de paro estructural que afectan a nuestro mercado de trabajo, unos problemas que pueden verse agravados con las fluctuaciones del ciclo económico, cuyos síntomas ya se vislumbran en la ralentización del ritmo de creación de empleo y de reducción del paro”.
“Y es que a pesar de mantenernos en un contexto laboral, en general, positivo, desde el fin de la pandemia, según la última EPA, el paro de larga duración suponía en la Región el 40,8% del total”, ha apostillado.
Por ello, UGT considera que la nueva Ley de Empleo “es una oportunidad perdida para potenciar unas políticas activas que son hoy más necesarias que nunca, ya que no resuelve, por ejemplo, la falta de orientadores suficientes para proporcionar a las personas desempleadas, –especialmente a las que tienen mayores dificultades– itinerarios personalizados de inserción”.
“La reforma laboral pactada, en cambio, sigue mostrando su eficacia para reducir la precariedad de las contrataciones”, según el sindicato, que recuerda que “el 64% de los contratos registrados en la Región ya son indefinidos, cuando hace un año representaban el 20% y hace dos, el 9%”.
A su parecer, “sigue siendo necesario, no obstante, seguir avanzando en la mejora y modernización de los derechos laborales de las personas trabajadoras, puesto que ello no perjudica el empleo, sino que lo protege”.
En este sentido, ha considerado que reactivar la negociación colectiva, en un contexto de altísima inflación, “es también imprescindible para una Región como la nuestra, que mantiene importantes negociaciones sectoriales en la incertidumbre y el conflicto, algo que no es bueno ni para las personas trabajadoras, ni para las empresas, ni para la economía regional”.
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