Intervenidas casi 2.000 plantas de marihuana, 650 gramos de cocaína, 400 gramos de metanfetamina y otros tipos de drogas
MURCIA, 13 (EUROPA PRESS)
Agentes de la Policía Nacional han detenido durante el mes de abril a 20 personas como responsables de 17 puntos de ventas de sustancias estupefacientes que han sido desmantelados en diferentes lugares de la Región de Murcia, por lo que se les ha imputado delitos contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico.
Las detenciones han tenido lugar en el marco de la lucha constante que viene desarrollando la Policía Nacional contra los delitos de tráfico de drogas en la Región de Murcia, siendo uno de sus objetivos la desarticulación de los puntos “negros” de venta de sustancias estupefacientes a pequeña y mediana escala así como aquellos inmuebles dedicados al cultivo y desarrollo de plantaciones de marihuana tipo “indoor”.
Así, la Policía Nacional desarrolló durante el pasado mes de abril varias investigaciones que condujeron a los agentes hasta 17 inmuebles, garajes y trasteros, que estaban siendo utilizados para estos fines, según informaron fuentes del citado Cuerpo en un comunicado.
El trasiego de personas consumidores de este tipo de sustancias estupefacientes suele ser una constante, entrando a estos inmuebles para volver a salir a los pocos minutos. Provocan “un grave perjuicio, gran alarma social y sensación de inseguridad entre los vecinos de la zona”, según las mismas fuentes.
Los entradas y registros tuvieron lugar principalmente en las ciudades de Murcia, Cartagena, Lorca y Yecla, y permitieron intervenir casi 2.000 plantas de marihuana en diferentes fases de crecimiento, 650 gramos de cocaína, 400 gramos de metanfetamina, 1.700 gramos cogollos de marihuana predispuestos para su venta y otras cantidades de diversos tipos de drogas tales como hachís, ketamina y éxtasis.
También fueron intervenidos cerca de 9.000 euros en efectivo, un revólver, una pistola, una escopeta y los útiles empleados para el cultivo y desarrollo de este tipo de plantaciones.
En muchos de estos puntos, los agentes se encontraron con fuertes medidas de seguridad como puertas reforzadas y circuitos de cámaras externas para vigilar la zona.
Todos los responsables, una vez detenidos, fueron puestos a disposición judicial de sus respectivas demarcaciones para la adopción de las medidas cautelares oportunas.
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