MURCIA, 5 (EUROPA PRESS)
Las organizaciones sindicales CCOO y UGT han amenazado con convocar una huelga general del sector de la función pública el próximo mes de febrero si antes no alcanza un acuerdo con el Gobierno regional respecto a la mejora de las condiciones laborales de este colectivo profesional y de la calidad de los servicios públicos.
Así lo han hecho saber los líderes de sendos sindicatos, Santiago Navarro y Antonio Jiménez, en una rueda de prensa ofrecida en el Palacio de San Esteban junto al consejero de Economía, Hacienda y Administración Digital, Luis Alberto Marín, tras mantener una reunión con el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras.
En este encuentro, el Ejecutivo murciano se ha comprometido a convocar de forma urgente una mesa de negociación para abordar, junto a CCOO y UGT, mejoras en la función pública, como la reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales y la reversión de los “recortes” adoptados en 2011 y 2012 y de la paga extra eliminada en 2014.
El encuentro es fruto del malestar de sendos sindicatos por el acuerdo puntual adoptado por el Ejecutivo regional con el Sindicato Médico CESM y el Sindicato de Enfermería SATSE, que contempla, entre otras medidas, la ampliación de los módulos de tarde y el incremento del número de médicos en Atención Primaria.
Para Navarro y Jiménez, este acuerdo se adoptó de forma unilateral, sin tener en cuenta a los sindicatos con mayor representación en el colectivo de empleados públicos, y supone una “vulneración” tanto la Constitución Española, como las leyes que regulan la negociación sindical.
Además, han señalado que se trata de un acuerdo “ineficaz” que “no sirve para recuperar la calidad del sistema público sanitario”, que no acomete mejoras organizativas respecto a la eliminación de cargas o reducción de listas de espera, al centrarse solo en “presiones económicas”, y que, además, excluye a grupos profesionales que quedan “absolutamente olvidados” por la Administración.
Los dos dirigentes sindicales han señalado que los problemas del sistema sanitario público se extrapolan a otros servicios, entre los que ha citado la educación pública o el Instituto Murciano de Acción Social (IMAS), donde, según han comentado, es necesario incrementar la plantilla.
Tanto Navarro como Jiménez han avanzado que esperan del Ejecutivo de la Región “compromisos inequívocos” a favor de los empleados públicos y una voluntad tendente a revertir los recortes. No obstante, han avanzado que CCOO y UGT proseguirán con sus movilizaciones y que la próxima tendrá lugar el 12 de diciembre frente al Palacio de San Esteban.
DISPOSICIÓN DEL GOBIERNO REGIONAL
Por su parte, el consejero Luis Alberto Marín ha calificado de “fructífero” el encuentro y ha expresado la voluntad y el compromiso de su gobierno por mejorar las condiciones de los empleados públicos de la Región de Murcia.
Tras tildar de “bueno” el acuerdo alcanzado por la Consejería de Salud con CESM y SATSE, se ha mostrado “absolutamente permeable” a escuchar y dialogar con CCOO y UGT. Por ello, ha destacado la importancia de crear, “tan pronto como sea posible”, la mesa negociadora.
Respecto a si el Gobierno regional contempla introducir en los Presupuestos de la Comunidad para 2023 alguna de las propuestas de sendos sindicatos, Marín ha insistido en que estas cuentas dedican el 82% de los recursos a “blindar” el estado del bienestar –educación, sanidad y políticas sociales–, al tiempo que ha recordado que esta es la autonomía “peor financiada” del país, con una medida de 650 millones de euros menos que la media nacional.
Pese a estas “limitaciones presupuestarias”, el consejero ha emplazado a los sindicatos a negociar en la mesa de trabajo, para estudiar las reivindicaciones de las fuerzas sindicales.
“Existe disposición e interés del Gobierno de la Región de Murcia por seguir trabajando junto a los sindicatos, y apostando por el bienestar de nuestros empleados públicos”, ha dicho el titular de Economía, quien ha recordado que “entre 2019 y 2023, el presupuesto para la Sanidad se ha incrementado en 453 millones, y solamente este año, el presupuesto de la Consejería de Salud es 160 millones superior al del año pasado”.
Por ello, el consejero ha subrayado que “estamos centrados en seguir mejorando el estado de la sanidad regional y las condiciones de trabajo de nuestros sanitarios”, y en esa tarea “somos permeables a cualquier aportación”, ha concluido.
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