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Urdiales y Ginés Marín logran una puerta grande en la segunda corrida de San Mateo de Logroño, en la despedida de ‘El Juli’

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LOGROÑO, 19 (EUROPA PRESS)

Los toreros Diego Urdiales y Ginés Marín -que ha sustituido al lesionado Morante de la Puebla- han salido por la puerta grande de la plaza de toros de La Ribera en Logroño, en la segunda de feria de San Mateo 2023. Un festejo que ha servido para la despedida de Julián López ‘El Juli’, que no ha tenido suerte con el lote de la ganadería de Juan Pedro Domecq; desiguales en presentación, nobles y faltos de clase, en general.

Mas de media entrada en el coso logroñés, que de inicio ha mostrado su cariño, con una gran ovación a ‘El Juli’. El madrileño ha invitado a unirse a los otros dos espadas en uno de los momentos emotivos de la tarde. Antes, ha recibido una placa homenaje de manos del presidente del Club Taurino Logroñés, Fernando Pascual.

Comenzado el festejo, uno de los triunfadores del mismo, el riojano Diego Urdiales, con el que ha hecho segundo, ‘Famoso’, negro de 575 kilos, ha ofrecido una clase magistral de toreo a la verónica, para rematar su gusto con el capote con un galleo por chicuelinas para llevar al toro al caballo.

Antes de comenzar la faena, que ha brindado a ‘El Juli’, ha destacado un par de banderillas de Víctor García ‘El Víctor’. A partir de ahí, Urdiales se ha topado con un toro al que le ha faltado parte de transmisión que ha sabido completar el riojano tirando de oficio, a partir de varias tandas de derechazos, con temple, y naturales espléndidos.

Una estocada hasta la empuñadura le ha servido al riojano para pasear las dos orejas.

Con su segundo, el quinto del festejo, un colorado chorreado, de nombre ‘Mensajero’, de 550 kilos, el de Arnedo ha iniciado de la misma manera su actuación, con brillante toreo de capa a la verónica. Un quite por chicuelinas, rematada con una larga para animar los tendidos.

Espectacular el inicio de la faena -tras brindar al público- con el toro arrancándose desde el el burladero llegando a los medios, donde se encontraba Urdiales, que ha ofrecido una sensacional tanda con la derecha. A ese ritmo ha seguido el diestro con la muleta, con varios naturales de enjundia, pero el toro a mitad de faena ha adolecido de casta y fuerza. Estocada delantera tras pinchar, siendo ovacionado el torero riojano.

BUENA FAENA AL SEXTO DE MARÍN

Por su parte, a Marín, que ha acompañado a Urdiales a hombros, el fallo con los aceros le ha empañado un triunfo que tenía ganado, al cuajar de manera fantástica a su primero -que hacía el tercero de la corrida-, un sobrero, también de Domecq -tras desecharse por falta de fuerza el que le había correspondido en suerte-, de nombre ‘Negrito’ de 550 kilos.

El jerezano ha ofrecido un toreo de temple, con la muleta, ligando con ambas manos, haciendo concebir al público que podía haber triunfo. En una tanda por bernardinas ha sufrido un corte el torero, que le ha hecho tener que pasar por la enfermería tras terminar su actuación y al final de la corrida. Ha pinchado al astado, recibiendo una gran ovación.

Con el ‘cierraplaza’, ‘Marc’, de nombre, de 545, ha sido con el que Marín ha obtenido el triunfo, con un gran saludo capotero, para después brillar con la muleta -faena brindada a ‘El Juli-, ante un toro huidizo al que el gaditano ha sabido meter entre las telas, con unos excelsos naturales, y una buena mano derecha. Ha rematado con circulares, levantando los olés del público, matando de media estocada, desorejando a de Juan Pedro.

‘El Juli’, por su parte, con su primer astado, un colorado de 510 kilos, de nombre ‘Jarreón’, se ha encontrado con un toro entregado en el capote del del barrio de San Blas, para pasar a ser un toro deslucido con la muleta. A pesar de ello, ha hecho gala de entrega, en los medios de la plaza, ofreciendo detalles de calidad. Pinchazo y estocada, para recibir palmas de los aficionados que han silbado al toro en arrastre.

En el cuarto de la tarde, el segundo de ‘El Juli’, ‘Molinero de nombre, negro de 575 kilos, lo ha lanceado con gusto a la verónica, para realizar un quite por lopecinas que han levantado a los tendidos.En la muleta, tras brindar al respetable, el toro ha ido a menos, a pesar del inicio de clase, con ligazón con la mano derecha del madrileño. Ha matado de buena estocada, tras pinchar, siendo ovacionado y respondiendo el diestro con saludos desde el tercio.


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