LOGROÑO, 26 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de La Rioja continúa trabajando en el refuerzo de la sanidad pública, mejorando la cartera de servicios con el objetivo de ofrecer a las riojanas y los riojanos la mejor asistencia sanitaria posible y posibilitando que los servicios públicos estén dotados de los suficientes recursos técnicos y humanos para ser capaces de garantizar el bienestar de todos los riojanos y las riojanas.
En este contexto, y coincidiendo con el Día Internacional del Daño Cerebral Adquirido, la consejera de Salud, María Somalo, ha visitado hoy la nueva Unidad de Neurorrehabilitacion Intensiva (UNRI), localizada en el Hospital de La Rioja, que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de personas afectadas por una discapacidad como consecuencia del daño cerebral sufrido tras un ictus u otro accidente cerebrovascular.
La consejera ha estado acompañada por los directores médico y de enfermería del Hospital San Pedro, Adolfo Calvo y Yolanda Caro, respectivamente; por el jefe del Servicio de Rehabilitación (RHB), Honorio Marín; la médico rehabilitadora, Natalia Álvarez; la supervisora de RHB, Silvia Jiménez, y la supervisora, Esther Campino.
Somalo ha detallado que “el objetivo fundamental de la Unidad de Neurorrehabilitacion Intensiva es realizar un tratamiento intensivo para que el paciente sea autónomo y se pueda manejar en su domicilio”. Hasta el momento, 15 pacientes se han beneficiado de una terapia intensiva. La única manera de proporcionar estas terapias es mediante el ingreso del paciente para que más tarde continúen en régimen ambulatorio.
“La unidad da continuidad al proceso que va de la mano de los servicios de Neurología y el de Rehabilitación de mejora del paciente con Daño Cerebral Adquirido que continuará creciendo en los próximos años según las necesidades de nuestra Comunidad”, ha destacado la consejera.
El Gobierno de La Rioja, a través del Servicio Riojano de Salud, puso en marcha el pasado mes de julio esta unidad, con una dotación de 4 camas, en el ‘Hospital de la Fragilidad’, para restituir, minimizar y/o compensar las alteraciones funcionales aparecidas en la persona afectada por una discapacidad como consecuencia del daño cerebral tras un ictus u otro accidente cerebrovascular.
Los beneficios de la Neurorrehabilitación Intensiva son múltiples como la mejora del tratamiento rehabilitador en aquellos pacientes con mayor potencial teórico de recuperación; además “se ha objetivado una disminución considerable de derivaciones a centros de convalecencia, del grado de discapacidad, así como menor necesidad de institucionalización”, ha añadido María Somalo.
El equipo que atiende la Unidad es multidisciplinar y en coordinación constante, y lo integra: médico rehabilitador, neuropsicólogo, trabajador social, personal de enfermería; logopeda, terapeuta ocupacional, fisioterapeuta y cuentan con la colaboración del servicio de Medicina Interna y Geriatría mediante interconsulta y también de otros especialistas del Hospital San Pedro.
Durante 2021, en el Hospital Universitario San Pedro (HUSP) ingresaron 498 pacientes por ictus. Se estima que en la nueva unidad atiendan entre 35-60 pacientes al año, con una estancia media de entre 30 y 45 días.
PROTOCOLO DE ACTUACIÓN
Los pacientes ingresados en Neurología del Hospital Universitario San Pedro con Daño Cerebral Adquirido son evaluados por un médico rehabilitador, iniciándose el tratamiento de rehabilitación hasta el final de la hospitalización. Previo al alta, el médico rehabilitador reevalúa al paciente y determina la necesidad y el tipo de continuidad del tratamiento. El destino al alta puede ser domicilio, centro de convalecencia, centro socio sanitario, residencia o Unidad de Neurorrehabilitación Intensiva.
Los pacientes que ingresan en la nueva unidad, cuando son dados de alta, se van con su programa de rehabilitación ambulatoria. En muchas ocasiones, si está indicado y sus circunstancias lo permiten, continúan en régimen ambulatorio el tratamiento intensivo neurorrehabilitador incluso con la misma intensidad que durante el ingreso. Se establecen objetivos funcionales y un plan de tratamiento pasando progresivamente a régimen rehabilitador externo convencional.
CRITERIOS DE INCLUSIÓN
Los principales criterios de inclusión en la UNRI son:
Edad y apoyo familiar: <70 años independientemente de su situación social, >70 años siempre que dispongan de un buen apoyo familiar. La edad no es un criterio condicionante en sí mismo.
Daño cerebral que requiera tratamiento en al menos dos áreas terapéuticas.
Estado de consciencia y/o daño cognitivo que permita participar activamente en el proceso rehabilitador.
Lesión cerebral de menos de 3 meses de evolución. Existe la posibilidad de recuperar pacientes que inicialmente se descartan pero que durante su estancia en convalecencia se convierten en candidatos para esta unidad.
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