PALMA, 28 (EUROPA PRESS)
El pleno del Ayuntamiento de Palma ha aprobado este viernes la parte estructurante del Nuevo Plan General de ‘Ciutat’, el paso definitivo en la tramitación del mismo.
Según ha informado el Consistorio en una nota de prensa, la parte estructurante del Nuevo Plan General (NPG) de Palma se ha aprobado este viernes de forma definitiva en una sesión extraordinaria del Pleno de Cort.
El Plan ha sido aprobado con los votos a favor de los grupos políticos que conforman el gobierno municipal. Por el contrario, los grupos de la oposición han votado en contra de la aprobación del Nuevo Plan.
ACUERDOS EN RELACIÓN AL NUEVO PLAN
En este sentido, el Pleno ha aprobado una serie de acuerdos en relación al nuevo Plan, que prevé un escenario de crecimiento moderado de hasta 510.026 habitantes para el año 2040, respecto los actuales 454.145 habitantes –según el Padrón de febrero de 2022–.
Esta previsión del NPG de Palma supone un crecimiento neto de 55.881 habitantes en ‘Ciutat’ frente al crecimiento de 120.000 en los últimos 20 años.
SUELO URBANIZABLE
Para conseguir cubrir las necesidades de vivienda asequible, zonas verdes, equipaciones y servicios futuros, el NPG las resuelve en un 70 por ciento en el suelo urbano a través de intervenciones de rehabilitación, regeneración y mejora urbana. Es así como el NPG reduce el suelo urbanizable casi a la mitad –280,54 hectáreas (Ha)– respecto al planeamiento anterior (494.71 Ha).
Se desclasifican 235 hectáreas, el equivaliendo a 335 campos de fútbol, en zonas de crecimiento residencial de baja densidad como por ejemplo Son Gual, Puntiró o Génova. Pese a ello se duplica el número de viviendas previstas en los nuevos crecimientos y áreas de transformación urbana y se cuadruplica el número de viviendas sociales.
Esto es posible por la planificación urbana con densidad poblacional sostenible de unas 75 viviendas por hectárea, frente a las cinco viviendas por hectárea que proponía el planeamientoanterior.
Respecto a las modificaciones entre la aprobación inicial y definitiva en relación a los urbanizables, hay que destacar que se suprimen los urbanizables de Son Sardina y Sa Indioteria Sur, y se reducen las superficies afectadas por los urbanizables de Son Cladera Norte, Son Cladera Sur, Son Puigdorfila y Son Pardo.
SUELO RÚSTICO
En relación al suelo rústico se produce un incremento de su protección. En concreto, con la nueva figura del Parque Agrario se protege la actividad agraria en 8.228 hectáreas, 2.649,29 hectáreas l’Horta de Dalt y 5.578,41 hectáreas en el Pla de Sant Jordi.
Lo mismo ocurre con las nuevas figuras de las Áreas de Interés Natural, equivalentes a las ANEI, como por ejemplo el suelo desclasificado de Son Gual, y las Zonas de Interés Paisajístico como por ejemplo los entornos del Monasterio de la Real o las Huertas de Es Molinar, incrementándose el suelo rústico protegido en 2.205 hectáreas.
SUELO URBANO
El nuevo Plan proyecta 9.997 viviendas sociales nuevas, multiplicando por 6,5 la vivienda social actual (1.500). Más de la mitad de las nuevas viviendas sociales (54%) están previstos en suelo urbano. Una de cada tres viviendas que se construirán en Palma serán de protección pública.
En total se prevén 27.743 nuevas viviendas de las que el 70 por ciento se encontrará en suelo urbano y solo el 30 por ciento en suelo urbanizable.
Entre las diferentes tipologías de vivienda que prevé el NPG hay que destacar la vivienda de protección pública (VPP), la vivienda cooperativa y el alojamiento dotacional.
A estas tipologías de vivienda sociales, se las complementa con las previsiones de residencial comunitario, con las residencias de estudiantes o residencias de gente mayor.
El nuevo Plan incrementa en más de un 44 por ciento (2.273.168 metros cuadrados) las zonas verdes de escala de ciudad creando así una red de Espacios Libres Generales de hasta 5.184.643 metros cuadrados, casi duplicando los metros cuadrados de zona verde por residente –pasando de 5,6 a 10 metros cuadrados de Sistema General de Espacios Libres por residente– que preveía el planeamiento anterior.
El nuevo Plan pasa de 7,4 kilómetros de ejes cívicos del PGOU del 98 a 133,23 kilómetros de conectores verdes urbanos y 100,10 de conectores verdes territoriales, pasando de los seis ejes cívicos urbanos del planeamiento anterior, a conformar una red de ejes verdes transversales, que conectan los barrios entro sí, y los ejes verdesterritoriales que conectan con los pueblos de Palma, como por ejemplo el camino de la Real y el camino de Passatemps.
El Nuevo Plan General incrementa casi un 30 por ciento –661.643 metros cuadrados de suelo– las equipaciones de escala de Ciudad, como por ejemplo polideportivos, sanitarios o docentes, entre otros.
El NPG destina un total de 303.575 metros cuadrados de edificabilidad a las equipaciones multifuncionales de barrio, por ejemplo casales de barrio o bibliotecas.
Se reduce un 82 por ciento la edificabilidad comercial en suelos urbanizables –de 845.614 metros cuadrados de techo a 153.501,6–, además el NPG establece medidas complementarias para evitar la aparición de nuevos grandes establecimientos comerciales.
Se fomenta el comercio de proximidad y de calle, estableciendo que un mínimo del 50 por ciento de la superficie comercial en los urbanizables se tendrá que ubicar en planta baja y también creando una red de 71,60 kilómetros de ejes de actividad económica en la ciudad consolidada, que se complementa con los ejes cívicos y la red de mercados municipales.
En cuanto a transición energética, el NPG recoge que el 15% del presupuesto de los proyectos de edificación y urbanización tienen que ser con materiales locales o materiales sostenibles con bajahuella de carbono.
Además, prevé impulsar los Programas de Mejora y Revitalización de Barrios en el parque edificado existente en barrios como, por ejemplo, Son Roca, Son Cladera o la Soledad.
El nuevo Plan General apuesta también por el 100 por ciento de autosuficiencia energética en suelos de transformación urbana y urbanizables, como por ejemplo Son Busquets o Son Güells.
Finalmente, el NPG determina que el 80 por ciento del agua de lluvia en los suelos de transformación urbana y urbanizables cerrará el ciclo del agua mediante medidas de reutilización, reciclaje y retención, tanto en la edificación como en el espacio público.
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