PALMA, 15 (EUROPA PRESS)
Un total de 85 incendios forestales han quemado 138,7 hectáreas en Baleares en lo que va de año, una superficie que en un 92% pertenece a Mallorca, según los datos publicados este martes por la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural.
Así lo ha explicado el conseller, Joan Simonet, quien ha presentado el balance de la temporada de incendios forestales –del 1 de abril hasta este martes– y ha alertado de que el riesgo persiste durante todo el año, por lo que ha pedido a la ciudadanía que mantenga la prudencia y precaución.
A lo largo del año, la Conselleria y el resto de organismos que participan en el Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Incendios Forestales (Infobal) han trabajado en la extinción de 85 incendios que han quemado una extensión de 138,7 hectáreas. Mallorca acapara la mayoría de incendios (62%) y de superficie quemada (92%).
De este balance, 65 fuegos (el 80%) sucedieron a lo largo de los meses de la temporada de incendios forestales, que quemaron un total de 128,8 hectáreas (el 93% del total del año), cifras que se sitúan ligeramente por encima de la media de la última década, cuando se han registrado un promedio de 60 fuegos y 99 hectáreas quemadas. De la superficie quemada durante la temporada de incendios, el 9% de este terreno era una zona arbolada –principalmente en Mallorca– y el resto carrizales o matorrales.
Esto se debe, en parte, a que la campaña ha estado marcada por una sequía acusada y al déficit de precipitaciones, que se ha extendido a la primavera y ha provocado que haya un número significativo de días con elevadas temperaturas y una situación de riesgo extremo de incendios, según la Conselleria.
“El riesgo de incendio forestal existe durante todo el año. No podemos confiarnos. Pedimos a la población mucha prudencia y precaución porque los incendios son una de las mayores amenazas para nuestro medio natural. Con el fuego siempre se debe estar en alerta máxima”, ha dicho Simonet, quien ha estado acompañado por la directora general de Medio Natural y Gestión Forestal, Anna Torres, y el gerente del Ibanat, Tomeu Labrés.
En el agregado de todo el año, los dos incendios forestales más relevantes se registraron en la Albufera de Mallorca, en el municipio de Sa Pobla, el 28 de mayo y el 8 de octubre, respectivamente. El primero quemó 50,4 hectáreas y el segundo 62, lo que supone el 81% de la superficie total quemada en 2024.
La gran mayoría de siniestros (el 89%) se han quedado en conatos –es decir, que han quemado menos de una hectárea– y se han producido a raíz de negligencias (también el 89%). El resto fueron por causas naturales, como rayos.
De acuerdo con los datos de los últimos 15 años, la tendencia general en cuanto al número de incendios forestales en Baleares va a la baja gracias, según la Conselleria, a las actuaciones de sensibilización, conciencia del riesgo, educación ambiental y normativa en el uso del fuego.
De todas formas, ha recordado Simonet, las perspectivas de riesgo de incendio van al alza debido al incremento del factor de vulnerabilidad y de probabilidad de ignición, al haber más población residente, más visitantes en zonas complicadas y más presencia de interfaz urbano-forestal.
Más allá de los incendios forestales, la Central de Comunicaciones de Incendios Forestales (CCIF) entre enero y septiembre ha atendido casi 3.000 incidentes, entre avisos de quemas controladas, incidencias de fauna, falsas alarmas de advertencias de humo o fuegos agrícolas, entre otros.
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