PALMA, 13 (EUROPA PRESS)
El Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB) ha confirmado conceder la incapacidad permanente total a un ayudante de cocina que padece varias limitaciones funcionales en una pierna provocadas por un accidente de moto.
La Sala ratifica de este modo el fallo de un juzgado Social de Palma que declaró su derecho a percibir una pensión mensual equivalente al 55 por ciento de su base reguladora de 1.362,99 euros.
El demandante sufrió un accidente de moto en febrero de 2021 que le causó diversas lesiones en una pierna que motivaron su baja temporal. El suceso le provocó un cuadro de artrosis postraumática severa con su consiguiente menoscabo funcional.
El INSS recurrió el fallo al sostener que la patología que sufre el hombre como consecuencia del accidente le permite realizar las tareas fundamentales de su profesión. Para el INSS, no se han agotado las posibilidades terapéuticas para recuperar la movilidad y conserva capacidad funcional para desarrollar su profesión de ayudante de cocinero.
El tribunal avala el razonamiento de la magistrada de instancia en el que señala que las dolencias del demandante no son compatibles con el trabajo de ayudante de cocinero, que “es de corte físico, requiere bipedestación prolongada y movimientos forzados durante toda la jornada laboral”. Estas funciones, apuntan, “inhabilitan para su adecuado y normal desempeño con el mínimo rendimiento y profesionalidad exigibles”.
La sentencia no es firme y contra ella cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo.
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