PALMA, 28 (EUROPA PRESS)
El Consell de Govern tiene previsto aprobar este viernes el decreto de medidas urgentes para facilitar el acceso a la vivienda en Baleares, el conocido como de emergencia habitacional, que introduce la figura de las viviendas a precio limitado sin consumir territorio.
A grandes rasgos, el texto contendrá medidas para habilitar la reconversión de locales y alojamientos turísticos obsoletos en viviendas, el incremento de alturas y la división de inmuebles para crear viviendas más pequeñas.
El objetivo es aumentar la oferta de vivienda a precio accesible en las áreas urbanas sin consumir territorio y generando una nueva vivienda que saldrá al mercado con unos precios –tanto de compra como de alquiler– regulados y limitados por la Administración.
Las viviendas, de este modo, no salen a precio libre y la voluntad es facilitar el acceso a la vivienda a familias con rentas medias y jóvenes en un momento en el que la figura de la vivienda protegida no da una respuesta total a la problemática.
Para la nueva vivienda de precio limitado, se establecen, entre otros requisitos, que no puede acceder una persona que ya sea propietaria de otra vivienda, y que la nueva vivienda tiene que constituir su domicilio habitual y permanente. Es decir, según resaltan desde el Ejecutivo, que los inmuebles no sean objeto de especulación.
Entre las principales novedades, el decreto ley habilitará, con carácter temporal, actuaciones como el cambio de uso de locales existentes (comerciales o administrativos, por ejemplo) para su reconversión en viviendas; el aumento de las densidades máximas, el aumento de la edificabilidad en altura, el cambio de uso de establecimientos turísticos obsoletos o parcelas de uso turístico o la cesión de terrenos de titularidad pública a la iniciativa privada.
Los precios, han hecho hincapié fuentes de la Conselleria, variarán en función del municipio, la etiqueta energética y los metros cuadrados aunque, en líneas generales se moverán, para el alquiler, en horquillas entre 385 euros y 905 euros; y para el alquiler entre los 102.000 euros y 241.000 euros, siempre tomando como referencia pisos de 60 o 80 metros cuadrados. Estas serían, han recalcado, los mínimos y los máximos atendiendo a las variables apuntadas en casos en los que no se trataría de obra nueva.
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