Inicio Islas Baleares Dos investigadores de la UIB colaboran en el seguimiento en tiempo real...

Dos investigadores de la UIB colaboran en el seguimiento en tiempo real de ondas gravitacionales en los Estados Unidos

0

PALMA, 7 (EUROPA PRESS)

Dos investigadores del Instituto de Computación Aplicada y Código Comunitario (IAC3) de la Universitat de les Illes Balears (UIB) han colaborado en el seguimiento en tiempo real de ondas gravitacionales en un observatorio de Livingston (Estados Unidos).

Durante su estadía de tres meses en el centro de colaboración científica LIGO, que ha formado parte de su programa de doctorado, ambos han participado en tareas relacionadas con la mejora de la sensibilidad de el observatorio a la hora de detectar las señales de este tipo de ondas.

Tanto Rafel Jaume como Joan-René Mérou, en una rueda de prensa celebrada este viernes, han explicado cómo a lo largo de este periodo han trabajado en la eliminación de las vibraciones sísmicas y fuentes de ruido –como las interferencias eléctricas, las fluctuaciones de temperatura o los efectos de la actividad humana– para asegurar que las datos recogidos acerca de las ondas gravitacionales sean lo más precisas posibles.

“¿Cómo podemos saber que es una onda gravitacional si hay ruido? Los criterios son muy rigurosos para decir que algo es una señal astrofísica, si no se califican como terrestres”, ha señalado Jaume.

Leer más:  Un hombre ha sido arrestado por amenazar con cortarle el cuello al personal sanitario de un hospital en Palma

De este modo, han explicado los investigadores, han podido mejorar la sensibilidad del detector y contribuir al seguimiento en tiempo real de los acontecimientos candidatos a ser catalogados como ondas gravitacionales. También han participado en diferentes proyectos destinados a mejorar las capacidades de LIGO.

“Hemos formado parte del grupo respuesta rápida de los detectores, en las que hemos hecho un seguimiento de las detecciones con los expertos y, una vez acabado, hemos enviado las correspondientes circulares a la comunidad científica”, ha apuntado Mérou.

Las ondas gravitacionales son perturbaciones ondulatorias en el espacio-tiempo que se propagan a partir de acontecimientos como la fusión de agujeros negros, colisiones entre estrellas de neutrones u otros fenómenos cósmicos altamente energéticos. Éstas, además, aportan información sobre los acontecimientos cataclísmicos que las crearon y ofrecen una nueva forma de estudiar el universo.

La UIB participa en la colaboración científica LIGO a través de su grupo de investigación en Física Gravitacional Teórica y Práctica (conocido como Gravity), que ha desarrollado instrumentos “altamente sensibles” que emplean la interferometría láser avanzada que se encuentran en los observatorios estadounidenses de Hanford (Washington) y Livingston (Louisiana).

Leer más:  Se ha restablecido el tráfico en ambas direcciones de la A-395 en dirección a Sierra Nevada

MEJORA DEL SISTEMA DE DATOS

Jaume, en concreto, se ha desempeñado estos meses tratando de mejorar los sistemas de adquisición de datos de LIGO, especialmente los convertidores analógicos-digitales (CAD), unos dispositivos que se encargan de convertir el primer tipo de señales en las segundas.

En su investigación, ha analizado cómo la interferencia entre los canales CAD podría distorsionar los datos, un problema crítico para los sistemas de detección que requieren de tanta precisión, y ha participado en la mejora de la calibración de las respuestas de LIGO a las ondas gravitacionales, reduciendo el sesgo en las medidas entre los agujeros negros y las estrellas de neutrones.

“Nuestro trabajo suele ser a nivel teórico y de análisis de datos, y en remoto participamos en la detección de los problemas y en encontrarles solución. Pero estos tres meses hemos podido estar in situ”, ha celebrado el estudiante de doctorado.

PROBLEMAS DE RUIDO

Por su parte, Mérou ha estado este tiempo enfocado en la identificación y mitigación de los diversos problemas de ruido, que han supuesto un “desafío” para los investigadores, ha expuesto la UIB en un comunicado.

Leer más:  Prohens solicita no resignarse ni normalizar episodios de 'okupación' en las islas

En concreto, ha sido capaz de identificar un problema de calibración que afectaba a un ruido cercano a la frecuencia del púlsar del Cangrejo, una estrella de neutrones situado en la nebulosa homónima, y de implementar un sistema automatizado para registrar la actividad del detector durante los momentos de “pérdida de bloqueo”, un sistema fundamental para garantizar la seguridad de los instrumentos empleados por los investigadores.

También ha formado parte de los grupos de respuesta rápida en la detección de posibles ondas gravitacionales, brindando apoyo a la validación en tiempo real de dos coalescencias de sistemas binarios de agujeros negros y enviando la correspondiente notificación a través de la Red de Coordenadas Generales de la NASA.


- Te recomendamos -