PALMA, 30 (EUROPA PRESS)
El Consell de Govern ha aprobado la contratación del servicio de prestación de asistencia sanitaria integral en el ámbito de Mallorca para derivar a pacientes de lista de espera del Hospital Comarcal de Inca, el Hospital Universitario Son Llàtzer y el Hospital Universitario Son Espases por un importe de 12,9 millones de euros.
Según ha informado este viernes el portavoz del Govern, Antoni Costa, en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern, el contrato tiene el objetivo de gestionar la contratación de servicios sanitarios que puedan dar una respuesta de calidad y en unos plazos “aceptables” a los pacientes que están en lista de espera para una intervención quirúrgica, una prueba diagnóstica o una consulta con un especialista y, por otra parte, ayudar a gestionar el incremento de la demanda asistencial.
El contrato tiene una duración de dos años, con posibilidad de prórrogas de hasta un año, y contempla una disposición de gasto de 12,9 millones de euros dividido en dos lotes: el primero de 6,5 millones de euros y el segundo de 6,4 millones de euros.
Así, están dedicados a derivar pacientes de las especialidades de urgencias, aparato digestivo, angiología, cardiología, cirugía general, cirugía torácica, cirugía oral y maxilofacial, dermatología, endocrinología, hematología, neumología, neurología, neurocirugía, oftalmología, rehabilitación, ginecología, reumatología, traumatología y cirugía ortopédica, otorrinolaringología, urología, pruebas diagnósticas funcionales y otros conceptos y unidad del dolor.
Según han señalado, en 2023 el Servicio de Salud de Baleares (IbSalut) derivó 13.996 pacientes de consultas externas dentro del contrato global de Mallorca por el Hospital Universitario Son Espases, el Hospital Universitario Son Llàtzer y el Hospital Comarcal de Inca. De enero a julio de 2024 se han derivado 5.951 pacientes de consultas externas y 541 pacientes para una intervención quirúrgica.
Este contrato está enmarcado dentro del Plan de Abordaje Integral de Listas de Espera puesto en marcha por la Conselleria de Salud, que tiene un doble objetivo: reducir el número de pacientes pendientes de una consulta con el especialista o de una intervención quirúrgica y el tiempo que esperan y, al mismo tiempo, aumentar la eficiencia de los recursos sanitarios de que se dispone.
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