PALMA, 14 (EUROPA PRESS)
La Federación del Hábitat de CCOO Baleares ha denunciado la agresión sufrida este lunes por una trabajadora del servicio de limpieza del Hospital Psiquiátrico por parte de un interno que, supuestamente, se encontraba en régimen de aislamiento.
Según ha informado el sindicato en una nota de prensa, los hechos se produjeron alrededor de las 20.30 horas del lunes, cuando la empleada, mientras abría la puerta de un despacho que se disponía a limpiar, fue abordada por la espalda por un interno que le propinó una brutal paliza, provocándole graves lesiones en mandíbula y nariz por las que tuvo que ser ingresada de urgencia y, presumiblemente, deberá someterse a intervención quirúrgica.
CCOO ha advertido que el de este lunes no es sino un episodio más de los muchos incidentes que se vienen registrando en dicho centro hospitalario como consecuencia de los “deficientes controles” alos internos y que se ve agravado por las “inacabables obras” que se están llevando a cabo y provocan que el Hospital se encuentre “sin iluminación de ningún tipo, falta de señalización de las obras y difícil acceso a los edificios”.
“Los accidentes por caídas están a la orden del día y dicha siniestralidad ya ha sido denunciada en diversas ocasiones sin que las autoridades e instancias competentes –el director general del IBSalut, Manuel Palomino, el director gerente de Son Espases,del que depende el Hospital Psiquiátrico, Josep Pomar– estén haciendo nada para remediarlo”, ha apuntado.
En esta línea, el sindicato ha considerado que la agresión del lunes pone de manifiesto “muchas de las carencias en materia de seguridad” de este Centro Hospitalario y se ha preguntado cómo es posible que la trabajadora agredida se encontrase “absolutamente sola, sin que ningún sanitario estuviera presente para controlar a los internos, y con la única luz que le dispensaba la linterna de supropio teléfono móvil”.
Resulta “vergonzoso”, ha continuado la Federación del Hábitat de CCOO Baleares, “que únicamente haya tres sanitarios por turno para todos los edificios del complejo y una única trabajadora de limpieza totalmente desasistida”.
Así mismo, ha creído conveniente hacer mención a que “no solamente reciben agresiones los sanitarios; sino que el personal de las empresas subcontratadas –vigilancia, limpieza o mantenimiento– también se encuentran en situación de vulnerabilidad y con dotaciones mínimas de trabajadores”.
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