PALMA, 14 (EUROPA PRESS)
La secretaria general del PSIB, Francina Armengol, ha reprochado que el Govern “no crea” en la vivienda como un “derecho”, sino en un “bien especulativo” para “llenar los bolsillos de muy pocos”, que encima “ya son propietarios”.
Así lo ha afirmado la representante de los socialistas baleares durante la jornada ‘La vivienda como un derecho irrenunciable’, organizada este viernes por el PSIB, en la que han podido recoger algunas propuestas en materia de vivienda de cara al 15º Congreso de la formación, que se celebrará la próxima semana.
La también presidenta del Congreso ha señalado que la vivienda es “el problema número uno” en el archipiélago, puesto que “muchas personas” no tienen la capacidad económica para alquilar o tener una vivienda digna.
En ese sentido, ha puesto el ejemplo de personas que se ven obligadas a vivir en campamentos, chabolas o caravanas, e incluso de parejas que se separan pero tienen que seguir conviviendo en la misma casa o irse a una habitación de alquiler.
Así, ha reivindicado que la vivienda se tiene que garantizar como un derecho y debería ser “el quinto pilar” del Estado del Bienestar. Además, ha señalado que las propuestas del PSIB son “creíbles” porque cuando gobiernan, “las ejecutan”.
Armengol ha puesto en valor la Ley balear de Vivienda, el aumento de las ayudas al alquiler, la construcción de vivienda pública o la habilitación del derecho del tanteo y retracto por parte del Govern.
De este modo, ha alegado que hasta que no se consiga un parque público de vivienda del 30% en Baleares, “no se logrará que la vivienda sea un derecho para los baleares”.
Otra de las cuestiones que ha planteado es el establecimiento del tope al alquiler, que permite la Ley estatal de Vivienda, y que ha recriminado que “no se aplique” en Baleares, cuando ha apuntado que en Cataluña ha permitido rebajar los precios y 6,8%.
LA POBLACIÓN VINCULA TURISMO A FALTA DE VIVIENDA
Tras la bienvenida de la secretaria general del PSIB, ha comenzado la mesa redonda, moderada por la diputada Mercedes Garrido, en la que han participado la secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez, el consejero de Vivienda y Agenda Urbana del País Vasco, Denis Itxaso, y la teniente de alcalde de Barcelona y regidora de Urbanismo, Movilidad y Vivienda, Laia Bonet.
Sánchez ha incidido en que cuando llegó a su cargo, advirtió al ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, que la población había establecido un “vinculo” entre el turismo y la falta de vivienda, algo que es “un vector de desigualdad”.
Por eso, ha defendido que como socialistas tienen que “intervenir en el mercado” y aplicar “mecanismos que reduzcan esta falta de vivienda”. Uno de los factores que ha mencionado Sánchez para los altos precios de la vivienda en Baleares es la “libre circulación de personas y capitales”, lo que permite que haya gente compra los inmuebles que los residentes no se pueden permitir.
Aún así, ha reconocido que hay un “nivel muy alto” de falta de suelo y de falta de construcción de vivienda por el aumento poblacional que ha vivido Baleares en los últimos años. En ese sentido, ha sostenido que el Govern destine el 25% de los ingresos del ITS para la compra de vivienda, puesto que la falta de vivienda es “una externalidad negativa” del sistema económico.
MÁS PERSONAS SOLAS QUE ACOMPAÑADAS EN EUSKADI
Acto seguido Itxaso, quien ha destacado la evolución de la demanda de vivienda en los últimos años y ha remarcado que en Euskadi ya hay más personas viviendo solas que acompañadas.
A esto, ha señalado que se le tiene que sumar el “leve crecimiento” demográfico de trabajadores migrantes para nutrir sectores como el turismo o los cuidados. Esto genera un fenómeno que con el mismo umbral, se necesiten más viviendas.
Para corregir esta situación ha apostado por medidas intervencionistas tanto en la oferta, como en la demanda de vivienda, porque ya no es un problema exclusivo de las clases populares, sino que afecta también a la clase media.
Por estos motivos, ha reivindicado la puesta en marcha de las zonas tensionadas en distintos municipios del País Vasco, porque es una herramienta que permite a las administraciones “ganar tiempo” hasta que se pone en el mercado nueva vivienda.
Igualmente, ha subrayado que esta medida la han solicitado ayuntamientos del PSE, PNV o EH Bildu e incluso en Francia hay consistorios conservadores que tienen limitación de precios porque es “un bien de primera necesidad”.
Sobre el alquiler turístico, Itxaso se ha mostrado favorable a prohibirlo en las zonas tensionadas, ya que, a su juicio, es “incoherente” que se retiren estas viviendas del mercado habitacional para dedicarlo a esta actividad.
“IRRESPONSABILIDAD” DEL PP
Para cerrar la mesa redonda, Bonet ha advertido que ya no se debe evaluar lo que las administraciones “pueden hacer”, sino lo que “deben hacer”.
De este modo, la regidora ha calificado de “irresponsabilidad” el hecho de que el PP “renuncie a buscar soluciones” y ha puesto como ejemplo la bajada de más del 6 por ciento en los precios de los alquileres en Barcelona, tras la declaración de la zona tensionada.
En el caso de Barcelona, ha alegado que es una ciudad que crece en población y económicamente, los núcleos familiares han cambiado, a eso se le añade que es la tercera ciudad de Europa más compacta, por lo que ya está “casi toda la ciudad construida”, y solo tiene tres zonas por desarrollar.
La representante local ha incidido en los cambios que hizo el nuevo gobierno municipal del PSC al empezar la legislatura, con los que ha indicado que han pasado de edificar 500 pisos al año a 1.000 y prevén que, al finalizar su mandato, puedan dejar preparado el suelo para levantar otros 10.000 pisos.
Para lograr estas metas, Bonet ha resaltado los convenios firmados con el Gobierno central y la Generalitat para que cada una de las administraciones financien un 16 por ciento de las viviendas que construyen en solares municipales.
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