PALMA, 20 (EUROPA PRESS)
El coordinador de MÉS per Mallorca, Lluís Apesteguia, ha celebrado este jueves el hallazgo de los restos de Aurora Picornell en la fosa de la Guerra Civil del cementerio de Manacor, pero ha lamentado llegar tan “tarde”, 85 años después de su asesinato.
En declaraciones a Europa Press, Apesteguia ha subrayado que el logro es fruto del trabajo iniciado en la pasada legislatura con la Ley de Fosas y la Ley de Memoria Democrática autonómica. Sobre esto último ha puesto en valor la labor de la entonces diputada de MÉS Margalida Capellà por conseguir que se aprobara por unanimidad, “una anomalía dentro del Estado español” en este tipo de normativas.
Con todo, el ecosoberanista ha matizado que aunque el hallazgo es “motivo de celebración”, “desenterrar a Aurora 85 años después de haber sido asesinada” supone “una ignominia para el Estado”. “Su hallazgo es motivo de celebración, pero llegamos tarde y todavía queda”, ha añadido, en alusión a las víctimas que quedan por identificar.
Apesteguia ha agradecido también el trabajo de las entidades memorialistas y ha valorado “poder dar dignidad” a los restos de la sindicalista. “Nos recuerdan que tenemos que ser dignos de la memoria y el legado de Aurora Picornell y de la gente que como ella dio la vida en defensa de unas ideas de igualdad y justicia que ahora más que nunca tienen que estar vigentes”, ha apostillado.
Además, el coordinador de MÉS ha lamentado la postura de quienes consideren que no se debe invertir en memoria histórica. “Creo que hay que tener el alma muy podrida para considerar que sacar de una fosa común a una persona asesinada y devolver sus restos a su familia para darle sepultura digna es un gasto innecesario”, ha aseverado.
Así, Apesteguia ha pedido “reflexionar” sobre “lo que significa para los descendientes de todas las personas represaliadas no saber dónde tienes enterrado a un familiar, dónde acabó y cómo acabó”, algo que es una cuestión “de humanidad”.
El Govern ha anunciado este jueves el hallazgo de los restos de la sindicalista y militante del Partido Comunista en una fosa del cementerio de Son Coletes de Manacor. El cuerpo de Picornell, asesinada la noche de Reyes de 1937, presenta cinco disparos y un traumatismo en una pierna.
Junto a él descansaban los restos de otras cuatro mujeres que se cree que son las conocidas como ‘las rojas del Molinar’: Catalina Flaquer, las hermanas Antonia y María Pascual Flaquer y Belarmina González.
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