MADRID, 23 (SERVIMEDIA)
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero criticó este domingo que el Partido Popular esté centrando buena parte de su labor de oposición en los negocios personales de la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, al entender que “hay que tener mucho cuajo” para hacer algo así con un tema que vaticina “va a quedar en nada y se va a archivar”.
En una entrevista con Servimedia, Zapatero tildó de “llamativo” que un juzgado de Madrid haya abierto una investigación contra Gómez a partir de artículos publicados en prensa e incluso puso en cuestión las pruebas principales que existen hasta el momento contra ella.
Zapatero adujo que las cartas firmadas por la mujer del presidente en apoyo de una UTE de empresas que se presentaron a un concurso público del Ministerio de Economía y Transformación Digital no pueden alegarse como una prueba de tráfico de influencias porque son públicas y forman parte del procedimiento “absolutamente normal y sin problemas” en estos casos. “Yo he firmado alguno”, dijo.
“Si la mujer del presidente del Gobierno quisiera hacer un tráfico de influencias y no fuera simplemente un trámite normal… ¿usted cree que va a firmar un papel y va a decir…? Tendría todas las vías del mundo como mujer del presidente del Gobierno para decir esta empresa”, expuso.
A su juicio, es “absurdo” que se acuse a Begoña Gómez de una cuestión así por firmar unas cartas de apoyo a un proyecto empresarial, dado que “nadie que vaya a ejercer un tráfico de influencias firma en un papel oficial”. “Es que es de perogrullo”, sentenció.
Zapatero concluyó, por todo ello, que el hecho de que el Partido Popular centre su labor en este asunto pone de manifiesto que Alberto Núñez Feijóo tiene “un cuajo muy especial”. “Yo no lo puedo entender, hay que tener mucho cuajo”.
DENUNCIAS CONTRA AZNAR
El ex secretario general del PSOE agregó que él nunca habría hecho algo así estando en la oposición y manifestó que en su control al Ejecutivo de José María Aznar entre 2000 y 2004 nunca se le “pasaba por la cabeza” atacar al entorno personal del entonces presidente para erosionar su imagen y su credibilidad.
Recordó, a modo de ejemplo, la boda de la hija de Aznar en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial en septiembre de 2002, a la que acudieron cientos de personalidades de la política y la economía española, incluidos los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía, así como dirigentes internacionales como el italiano Silvio Berlusconi y Tony Blair.
“Recuerdo la boda de Aznar y que yo di indicaciones a mi partido de que no haya ninguna crítica, que disfrute la hija”, rememoró. “Si yo quiero ganar en política no es por intentar hacer estas cosas al adversario, nooooo, y menos a la mujer y con el hermano, nooooo. Lo más probable es que así no ganes nunca y si ganas… no, mal, mal. Es mi forma de ver la política”.
Zapatero añadió que, estando ya en el Palacio de la Moncloa, recibió “alguna vez denuncias contra la familia del presidente Aznar” pero prefirió meterlas “en el cajón” porque “no quería saber nada” de determinadas prácticas y prefería “no hacer un ataque a la oposición” de ese calibre.
REGULAR LAS PAREJAS
Preguntado sobre la conveniencia de regular la figura de la pareja de los presidentes del Gobierno para evitar que se repitan controversias como la de Begoña Gómez, Zapatero desechó esa posibilidad al entender que no es “necesario” y al asumir al mismo tiempo que “siempre será una regulación complicada y difícil”.
Zapatero considera que “nunca ha pasado esto” en el caso de “otras mujeres” de los presidentes del Gobierno, tampoco la suya pese a que Sonsoles Espinosa siguió trabajando en la lírica durante los ocho años que permaneció en La Moncloa junto a su marido.
En su opinión, todo lo que sucede ahora es fruto de una estrategia para erosionar al actual líder del PSOE con toda clase de motivos, desde el uso del Falcon en sus viajes hasta los negocios personales de su mujer o el patrimonio de su hermano. Y denunció que “nunca se ha atacado a un presidente del Gobierno como le está pasando a Pedro Sánchez sin límite”.
“Me produce una gran incomodidad. El respeto personal a quien es tu adversario principal, puesto en la mujer el foco, porque todos sabemos que si atacan a Begoña Gómez no es porque haya hecho esto, es porque es la mujer del presidente del Gobierno”, apostilló.
Lamentó que “el Partido Popular ha optado por esta vía” para hacer oposición y lamentó que “cada uno es como es”, porque Zapatero aseguró que le generaría “pudor” emplear este tipo de prácticas, metiendo a la familia de sus adversarios políticos en el combate entre partidos.
Finalmente, Zapatero alabó que la reacción de Sánchez frente a la investigación judicial de su mujer fuera escribir una carta pública a la ciudadanía y tomarse cinco días de reflexión para valorar si debía continuar al frente de Gobierno de España o renunciar al cargo para proteger a su familia.
Zapatero achacó esa decisión de Sánchez a una “intuición” política y ensalzó las consecuencias positivas que tuvo para movilizar a los simpatizantes y votantes socialistas ante las elecciones catalanas de mayo y las europeas de junio, puesto que provocó un auge de la “autoestima del PSOE”.
- Te recomendamos -