MADRID, 21 (SERVIMEDIA)
Unidas Podemos espera a ver cómo el PSOE concreta sus enmiendas a la ‘ley trans’ para estudiar un posible acuerdo, mientras a su vez ha registrado propuestas de modificación a la proposición de ley socialista contra todas las formas de proxenetismo, para castigar la explotación de la prostitución y no el ejercicio libre de ésta.
“Cuando veamos las enmiendas, valoraremos”, emplazaron a Servimedia fuentes del equipo de la ministra de Igualdad, Irene Montero, después de que el PSOE anunciara ayer que sus enmiendas no tocarán la llamada autodeterminación de género, el punto clave de la norma, que ha sido cuestionado por la exvicepresidenta primera del Gobierno Carmen Calvo y otras feministas socialistas.
Ayer, fuentes del PSOE puntualizaron que, aun sin discutir la autodeterminación de género, siguen con dudas “sobre la equiparación de algunas violencias a la violencia de género” y que pretenden con sus propuestas de modificación “dar seguridad jurídica a la Ley” y “hacerla más robusta” ante los eventuales recursos del PP y Vox al Tribunal Constitucional. Pero, a falta de concreción de dichas enmiendas, en Unidas Podemos aplazan su posición sobre si será posible llegar a un acuerdo con su socio de gobierno.
Lo que sí ha hecho el grupo confederal es enmendar a su vez la proposición de ley del PSOE contra “todas las formas de proxenetismo”. En concreto, según explicaron a Servimedia fuentes de UP, canalizando como propuestas de modificación el texto de consenso que la mayoría de los grupos parlamentarios quisieron introducir en la Ley de Garantía de la Libertad Sexual, y del que los socialistas se salieron para penalizar la llamada tercería locativa. Para no tumbar la norma, el PSOE finalmente transformó esa intención en la proposición de ley.
EXPLOTACIÓN Y CONSENTIMIENTO
Así, Unidas Podemos quiere sustituir el enunciado para penalizar a todo aquél que “con ánimo de lucro, promueva, favorezca o facilite la prostitución de otra persona, aun con el consentimiento de la misma”, como recoge el PSOE en su iniciativa, por este otro: “Se lucre explotando la prostitución de otra persona. Se entenderá que hay explotación cuando exista una relación de dependencia o subordinación en la que quien se lucra impone las circunstancias de toda índole que condicionan la libertad sexual de la víctima”.
En cuanto a la tercería locativa, el alquiler de locales para el ejercicio de la prostitución, Unidas Podemos también quiere matizar el texto de la proposición del PSOE, para castigar a quien vaya a “favorecer” y no sólo “facilitar” la “explotación” de la prostitución, y no sólo la prostitución si ésta no está explotada. Igualmente, pretende eliminar la apostilla “aun con su consentimiento” que los socialistas han incluido en su afán de abolir cualquier prostitución, incluso la voluntaria. En el mismo sentido, Unidas Podemos propone la supresión del artículo de la iniciativa que penaliza y multa a los clientes de prostitución, por no hacer distingos entre la coactiva y la libre.
Es decir, según las fuentes consultadas, UP “pone el consentimiento en el centro”, como también defienden ERC, Ciudadanos, el PNV, EH Bildu, JxCat y la CUP. Esta focalización era especialmente importante para la confluencia catalana del espacio confederal, los Comunes, que, como el resto de formaciones catalanas, son receptivos a las demandas de las asociaciones de trabajadoras sexuales.
El Grupo Socialista y Unidas Podemos sí han registrado enmiendas conjuntas a la Ley del Aborto, aunque el grupo confederal también ha presentado otras de detalle y carácter técnico por su cuenta. Las tres normas superaron ya las enmiendas a la totalidad y pronto entrarán en la fase de ponencia. Las fuentes consultadas del grupo confederal aplazaron a ella para valorar si es posible o no llegar a algún acuerdo con su socio de Gobierno.
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