MADRID, 22 (SERVIMEDIA)
Unos narcotraficantes radicados en Cáceres se hacían pasar por pintores de brocha gorda, de forma que incluso vestían mono de trabajo, para distribuir cocaína procesada en un laboratorio.
Según informó la Policía este sábado, como integrantes de esta banda han sido detenidas 11 personas, que usaban camiones con palés para ocultar los ladrillos de cocaína en envases de pintura.
En la finca donde operaba el laboratorio actuaban cinco personas que producían hasta 100 kilogramos diarios de esta sustancia. Compaginaban esta labor con la cría de animales, concretamente gallos de pelea y perros de caza.
La investigación se inició a principios de este año, cuando se detectó que un clan familiar se había asentado en Cáceres para instalar un laboratorio de producción de cocaína a gran escala, tras encargarse de toda la logística e infraestructura necesaria.
SOFISTICADO SISTEMA DE OCULTACIÓN
El grupo criminal había captado en Colombia a los cocineros para elaborar el estupefaciente en una finca con grandes medidas de seguridad, que contaba con numerosas parcelas alrededor y un solo acceso, disimulando la actividad delictiva con criaderos de animales.
Un matrimonio que regentaba un bar en la localidad madrileña de Humanes dirigía todo el funcionamiento del laboratorio, aprovechando su restaurante como lugar de reuniones y centro logístico de la organización.
Los investigadores detectaron que un varón simulaba ser pintor vistiendo mono de trabajo y conducía furgonetas cargadas con sustancias químicas utilizadas como precursores para la fabricación de la droga.
A finales de febrero se realizó un dispositivo policial con participación del Grupo Especial de Operaciones (GEO) para la entrada y registro del laboratorio, donde encontraron a los cinco cocineros trabajando a turnos las 24 horas.
IMPORTANTE DECOMISO
Durante el registro se intervinieron 450 litros de cocaína base disuelta en líquido, 7.000 litros de precursores, 65 kilogramos de clorhidrato de cocaína, 40 kilogramos de cocaína base, 7.000 euros, una escopeta y munición.
Los agentes también interceptaron una furgoneta de alquiler con numerosos botes de pintura blanca, uno de ellos conteniendo dos kilogramos de cocaína ocultos en su interior.
Los once detenidos pasaron a disposición judicial como presuntos responsables de los delitos de pertenencia a grupo criminal y contra la salud pública, decretándose el ingreso en prisión de diez de ellos.
- Te recomendamos -
