MADRID, 31 (SERVIMEDIA)
La vicepresidenta tercera del Gobierno y cabeza de lista del PSOE a las elecciones europeas del 9-J, Teresa Ribera, advirtió este viernes a orillas del Mar Menor que no hay dicotomía “entre economía y ecología” porque “no hay economía ni progreso social con un planeta muerto”.
Las palabras de Ribera en el acto del PSOE, acompañada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, estuvieron en todo momento acompasadas por gritos de fondo de personas que acudieron para protestar y a los que la vicepresidenta se dirigió en varios momentos. “Chillan porque no les gusta el Gobierno de progreso, no es por el problema del agua, del medio ambiente,” sino “simplemente que no les gusta contar con un Gobierno que piensa en las personas”, exclamó.
Ribera aprovechó la coyuntura y expuso todo su mensaje de agenda verde y su apuesta por la recuperación del Mar Menor, así como su política de agua para reivindicar que el Ejecutivo que preside Sánchez es el que más agua del trasvase ha facilitado para la Región de Murcia. Hay que “conciliar las dos cosas, economía y ecología”, argumentó, porque es “la única manera de conciliar la prosperidad para todos”.
Mientras intervenían los dirigentes socialistas, de trasfondo se escuchaban gritos y bocinas de personas que reclamaban menos burocracia para el campo, hasta el punto que cuando hablaba el candidato Marcos Ros asegurando que los socialistas están “más fuertes que nunca” y el 9-J va de “tener derecho o de que gobierne la derecha”, el público estalló con gritos de “Pedro, Pedro” para tapar los pitos.
De hecho, desde sus primeras palabras, Ribera animó a los socialistas como “defensores convencidos y pacíficos de los derechos, las libertades, la ciencia y la democracia, frente a los pitidos y la ultraderecha”. Y a los de fuera les pidió que “griten menos, piensen más y generen ganas de trabajar juntos”.
Desde Los Alcáceres, un “rincón del Mar Menor”, el líder de los socialistas murcianos, Pepe Vélez, celebró cómo ha cumplido Sánchez su compromiso con la recuperación de este enclave, porque “el Mar Menor es la mejor demostración de las terribles consecuencias de las políticas de la derecha y la ultraderecha” y porque las inversiones del Gobierno aseguran el agua para esta región.
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