MADRID, 06 (SERVIMEDIA)
El debate en TVE de los cabezas de lista al Parlamento Europeo dejó clara la ruptura entre los nueve partidos que se medirán en las urnas, entre aquellos que abogan a toda costa por la diplomacia como única herramienta para terminar con el conflicto en Ucrania por la agresión rusa, y aquellas formaciones que mostraron su apoyo a Kiev frente al Kremlin.
Abrió el capítulo de debate la representante de Coalición por una Europa Solidaria (CEUS), Oihane Agirregoitia, que abogó por una Europa como “agente de paz” nacido “de los escombros de la Segunda Guerra Mundial”, y por ello reclamó una UE que “ofrezca seguridad y protección”, que sea “contundente contra violaciones de derechos humanos como las que estamos conociendo en la agresión de Rusia en Ucrania o en Palestina”.
Estrella Galán, por Sumar, se centró en la decisión española de secundar la denuncia de Sudáfrica contra Israel ante el Tribunal Internacional de Justicia y aseveró que “lo que tenemos es que parar el genocidio y para ello hay que dar más pasos, hay que ser valientes para hacer el embargo de armas y sancionar a nivel europeo, y hay que romper las relaciones diplomáticas” con Israel.
“Hay tres pueblos sometidos que tienen que estar presentes en toda la política exterior: por supuesto Palestina, Ucrania, pero no quiero que el olvidado pueblo saharaui, que es además una responsabilidad española, desaparezca de la agenda europea”.
INJERENCIAS EXTRANJERAS
Para Dolors Monserrat, del PP, “una de las mayores preocupaciones en Europa es Putin y sus injerencias, porque buscan desestabilizar las democracias y acabar con las libertades” del club comunitario. En la misma línea señaló que “el Parlamento Europeo se ha tomado muy en serio, investigar cualquier conexión con Putin en Europa y ha encontrado turbios vínculos con el movimiento independentista catalán, y concretamente con Puigdemont”.
Por Junts, Aleix Sarri, consideró que la UE debe “acabar con la regla de la unanimidad”, ya que lleva, en su opinión, a la “parálisis” en política exterior y a que no sea capaz de “tener el rol que tenemos que tener en el mundo”.
“Europa no puede ser una superpotencia militar, pero sí que puede ser una superpotencia democrática y en eso es lo que nos tenemos que centrar”, recalcó.
No obstante, apuntó que “el principal problema de seguridad que tiene Europa es Ucrania” porque “la invasión imperialista de Putin no se detendrá en Ucrania: si Putin consigue controlar Ucrania, la mitad o más, luego pasará a intentar controlar Letonia, Lituania, Estonia”, etcétera.
“Por lo tanto, tenemos que defenderlos, es imprescindible enviar armas a Ucrania porque algunos nos acordamos de que en la Segunda República, Francia e Inglaterra se negaron a defendernos y las consecuencias las hemos vivido todos posteriormente”, explicó.
EL DESEMBARCO DE NORMANDÍA
En su turno, Jordi Cañas de Ciudadanos, afirmó que Europa “tiene que decidir si quiere estar sentada en la mesa de los comensales o quieres ser parte del menú” y para eso “tiene que garantizar su seguridad”, porque “no podemos contar con nuestros aliados siempre y para eso tenemos que tener la capacidad de garantizar y defender nuestra democracia”.
Para Irene Montero, de Podemos, la principal amenaza para la seguridad de Europa “es la sumisión que tenemos a los intereses bélicos y militares de los EEUU”. A este respecto lamentó que hubiese visto hoy a la presidenta de la Comisión, Úrsula Von der Leyen “en un búnker”. Para Montero, “esta señora y las élites europeas nos llevan a la guerra y quieren que construyamos búnkeres y que la gente de los pueblos de Europa se pegue por entrar en refugios antiaéreos, mientras faltan pediatras en los centros de salud”.
“Sólo falta que los búnkeres que hay que construir en España la concesión se le otorgue a Florentino Pérez; yo creo que ni mi madre, ni mis hijas, ni mis amigas, ni nadie hemos conocido un refugio antiaéreo, un búnker, más que en las películas y honestamente tiene que seguir siendo así”.
A estas afirmaciones respondió Cañas, de Ciudadanos, que le espetó que “eso no depende de nosotros, depende de quién nos agrede, depende de Putin”, y agregó que “la paz no es una cosa mágica, es que, si alguien quiere romperla, y Putin la ha roto, y si uno vive en la frontera con Rusia, claro que tiene miedo”.
Montero le replicó que “las guerras se paran con negociaciones de paz y con diplomacia, no con más guerra”.
Cañas aprovechó que este jueves se cumplía el 80 aniversario del desembarco de Normandía en la Segunda Guerra Mundial para esgrimir ante la candidata de Podemos que “no habría parado a los nazis”.
“Miles y miles de jóvenes murieron en las playas de Normandía para defender la democracia y la libertad, porque la paz no se decide unilateralmente, la paz a veces se tiene que defender y se tiene que conquistar”, enfatizó el candidato de Ciudadanos.
POLÍTICA “SECUESTRADA”
A juicio de Diana Riba, de Ahora Repúblicas, en los últimos meses “no estamos hablando de la política exterior, que es la política de la diplomacia, la política del desarrollo” y aseveró que “la política armamentística ha secuestrado a nuestra política exterior”.
“Nosotros creemos que tenemos que hablar más de diplomacia, de cooperación, de desarrollo de ayuda humanitaria, porque si no nos vamos a quedar sólo con la industria armamentística”, dijo. “No queremos que se compren más armas, que se destine más dinero”, sino que “tenemos que volver a poner el dinero en hospitales, en escuelas y universidades”.
Oihane Agirregoitia, de Coalición por una Europa Solidaria (CEUS), defendió desarrollar “una política común de seguridad y de prevención ante posibles amenazas que son locales y globales”. Para ello esgrimió la necesidad de acabar con la regla de la unanimidad en las votaciones en el seno de la UE, y abogó además por desarrollar un Estado Mayor de la UE e “integrar el trabajo de la inteligencia sobre las amenazas híbridas y los intentos de injerencia de potencias extranjeras”.
Teresa Ribera por el PSOE afirmó que “estamos enfrentando situaciones tremendas, muy complicadas, algunas muy cerca de nuestras fronteras”, y sostuvo que es necesario “fortalecer Europa, fortalecer una diplomacia y una voz única” como la del Alto Representante Josep Borrell. Asimismo, defendió la coherencia del Gobierno con Palestina y Ucrania.
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