MADRID, 08 (SERVIMEDIA)
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, negó este miércoles que el cese del jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla obedezca a que éste solicitase un protocolo de actuación ante los saltos de inmigrantes a la valla, como le acusó el PP.
Así lo hizo durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, en respuesta a la pregunta de la diputada del PP de Ana Belén Vázquez Blanco, que le pidió una explicación por el reciente cese del jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla, el coronel Jesús Vicente Torresano, que fue relevado del puesto a finales de enero, tres meses después de su nombramiento para el cargo en la ciudad autónoma.
Cabe recordar que su breve mandato se vio salpicado por la polémica desatada por las investigaciones periodísticas y de la Fiscalía sobre el trágico salto a la valla que se produjo el 24 de junio de 2022, en el que, según las cifras oficiales, perdieron la vida 23 personas.
Grande-Marlaska aseguró respecto al cese del coronel de Melilla que, “en la cadena de mando soy yo evidentemente el que está arriba”, pero, agregó que “esta decisión la toman los mandos, sus jefes directos por entender que los criterios de eficacia y eficiencia que deben dirigir la política de seguridad aconsejaban su traslado a la jefatura de Educación”, en una decisión “que yo evidentemente respaldo y respeto”.
PROTOCOLO PARA LOS SALTOS
En la réplica, la diputada del PP acusó al titular de Interior de cesar al coronel Torresano “porque le pidió un protocolo para los asaltos en la valla de Melilla”, y por “pedir que, al igual que investigaba a los guardias civiles, había que investigar a los inmigrantes que habían agredido a esos guardias civiles”.
En la misma línea, consideró Ana Belén Vázquez Blanco, que “si el coronel Torresano dos meses antes fue nombrado por el Secretario de Estado, porque reunía condiciones” el ministro debería cesar al Secretario de Estado.
La diputada del PP dijo a Marlaska que “tiene garantizado pasar a la historia por tener a todas las asociaciones de la Guardia Civil en contra, y por ser el ministro de la mentira, por dejar abandonados a los guardias civiles en Melilla”. Y añadió que “pasará por su sectarismo, pasará por el récord de ceses injustos e injustificados, y pasará por jugar con los profesionales de la Guardia Civil y de la Policía”.
Durante la contrarréplica, Fernando Grande-Marlaska subrayó que “respecto a la Guardia Civil en Melilla fue este ministro quien respaldó en todo momento su actuación”, y agregó que lo hizo “poniéndose delante de ella, no detrás y siendo confirmado por el Ministerio Fiscal”. El ministro alegó, además, que “ayer la BBC rectificó un informe al que ustedes le dieron mayor validez que el que dieron a los informes de la Guardia Civil “.
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