MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
La alcaldesa de Majadahonda, Lola Moreno, presidirá este viernes un homenaje en memoria de Miguel Ángel Blanco, el concejal del PP vasco asesinado por la banda terrorista ETA el 12 de julio de 1997.
Según informó el Consistorio, el acto se celebrará a las once de la mañana en la Rosaleda de las Víctimas del Terrorismo, situada en la avenida de España.
Está prevista la asistencia de los portavoces de los grupos municipales, concejales, párrocos del municipio, representantes de organizaciones, así como los ciudadanos que quieran participar. El homenaje comenzará con la actuación de la Escuela Municipal de Música, seguida de la lectura conjunta del manifiesto de la Fundación Miguel Ángel Blanco por parte de los portavoces de los distintos grupos municipales.
Posteriormente, intervendrá la alcaldesa Moreno y el párroco Francisco Pérez oficiará un responso. Se guardará un minuto de silencio en memoria de todas las víctimas del terrorismo.
Finalmente, la alcaldesa y los portavoces de los grupos políticos municipales realizarán una ofrenda floral. El acto terminará con una nueva actuación de la Escuela Municipal de Música y una fotografía de familia.
‘¡TÚ Y TODOS!’
Este año, en su manifiesto titulado ‘¡Tú y todos!’, la Fundación Miguel Ángel Blanco reivindica el imborrable recuerdo del joven concejal del PP asesinado por ETA, un hecho que cambió la historia de España, y con él, el de todas las víctimas de atentados terroristas.
Blanco fue secuestrado por ETA el 10 de julio de 1997 cuando se dirigía a su trabajo en la localidad vizcaína de Eibar. La banda terrorista amenazó con asesinarle si el Gobierno no trasladaba a todos los presos etarras a cárceles del País Vasco en un plazo de 48 horas.
Ante la negativa del Ejecutivo de José María Aznar a ceder al chantaje, ETA cumplió su amenaza y asesinó al joven concejal de dos tiros en la cabeza. Su cuerpo sin vida fue encontrado en un descampado de la localidad guipuzcoana de Lasarte dos días después de su secuestro.
El brutal asesinato del edil provocó una oleada de indignación en toda España y marcó un antes y un después en la lucha contra ETA. Miles de ciudadanos se echaron a las calles para mostrar su repulsa al terrorismo y su solidaridad con las víctimas.
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