MADRID, 09 (SERVIMEDIA)
La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), que lidera José María Aznar, emitió este jueves un comunicado en la víspera de la toma de posesión del nuevo presidente de Venezuela y fue muy duro con el Gobierno de Pedro Sánchez, al que afeó su “complicidad con la narcodictadura” de Nicolás Maduro porque “defrauda el papel” que España tiene asignado por “su trayectoria histórica”.
En su último editorial, titulado ‘Con la democracia venezolana’, la organización censura la falta de “claridad” del Gobierno, que “todavía no ha reconocido la victoria de Edmundo González y su condición de presidente electo de Venezuela”, y al que acusa de haber “colaborado en la maniobra que forzó” el exilio del candidato de la oposición venezolana.
“[El Gobierno español] mantiene, cuando las primeras democracias del mundo han hecho ya las declaraciones pertinentes, una postura que camufla de pragmatismo realista su efectiva complicidad con la narco-dictadura. No hay ‘mediación’ posible entre democracia y autocracia, porque no existe punto intermedio entre el respeto de la soberanía popular y su violación cotidiana”, prosigue el escrito. Y remata: “España defrauda el papel que le asigna su trayectoria histórica y su condición de nación democrática cuando su Gobierno asume labores de indigna tercería que prolongan la usurpación madurista”.
FAES defiende que España debe “hacer de puente entre la Unión Europea y los venezolanos”, tanto los que “resisten en el interior para exigir el respeto de sus derechos”, como los exiliados “para facilitar su regreso”. Y también “entre un pueblo secuestrado por una pandilla criminal y la comunidad de naciones libres, para hacer inviable la tolerancia exterior que necesita un régimen en trance agónico”.
“Entre esos actores y para esos objetivos”, la fundación liderada por Aznar cree que el Gobierno de Sánchez tendría “un ancho campo donde ejercitar su vocación ‘mediadora’” si tuviera “claridad moral y pensamiento estratégico”. O, en otras palabras, si tuviera “claro que, en la ‘resolución’ de cualquier ‘conflicto’ que enfrente libertad con despotismo, toda táctica debe subordinarse a la consecución del único final decente: la democracia gana, la tiranía pierde”. Pero lamenta que, “en el caso de este Gobierno, los precedentes no son alentadores”.
“El régimen busca consolidar un autogolpe que mantiene secuestrada la voluntad popular y ha convertido Venezuela entera en un inmenso presidio. Es la hora, por tanto, de secundar con hechos los discursos, con obras las intenciones, con acción la convicción. Es la hora de la claridad. Claridad que deploramos no encontrar en quien más debería tenerla en esta encrucijada histórica”, señala FAES al tiempo que avisa de que “ningún demócrata español puede contemplar” la “cita inaplazable” que afronta Caracas este viernes “como simple espectador”.
“El mundo asistirá expectante al desenlace de una tragedia cuyo último acto viene representándose desde hace meses, aunque la obra dure ya demasiados años. El resultado de tal desenlace es estrictamente binario: o toma de posesión del presidente electo o usurpación del poder por la casta delincuente que lo detenta”, plantea la fundación, que reafirmó su “inequívoco apoyo” a la candidatura de Edmundo González y su “rotunda condena del fraude electoral perpetrado por el madurismo”.
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