MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
El Partido Socialista de Salvador Illa ganó este domingo las elecciones autonómicas en Cataluña con 42 escaños y podrá gobernar al frente de la Generalitat si suma el apoyo en la izquierda de Esquerra Republicana y los Comunes. Juntos alcanzan de manera raspada los 68 diputados que otorgan la mayoría absoluta en el Parlamento regional.
El escrutinio de los comicios fue de lo más ajustado hasta el último momento y provocó que los candidatos esperasen a casi las once de la noche para salir a valorar el resultado, ya que la mayoría absoluta de izquierdas estuvo bailando todo el tiempo y sólo con el 95% del recuento de votos acabó consolidándose gracias a un escaño arrebatado por el PSC a Junts en la provincia de Lleida.
El PSC de Salvador Illa mejoró su resultado de 2021 al ascender de 33 a 42 representantes gracias a un crecimiento de casi el 5% y a 212.000 votos arrebatados a otras formaciones, principalmente en la izquierda. De hecho, los socialistas son los más votados en las provincias de Tarragona y Barcelona, en esta última con diez puntos de ventaja sobre Junts y más del doble de papeletas que ERC.
Hace tres años, Illa también ganó en las urnas pero empató con los republicanos y se quedó sin el poder porque Pere Aragonés prefirió una alianza independentista con Junts para conformar un gobierno de coalición. Ahora, el PSC tiene más cerca gobernar pero deberá convencer a los otros partidos izquierdas para que le invistan presidente.
De momento, la cabeza de lista de los Comunes, Jessica Albiach, apuntó por esa posibilidad al comparecer tras el escrutinio convencida de que esa mayoría de izquierdas es posible. Aragonès, por su parte, reconoció que el resultado había sido “muy malo” para sus intereses tras tres años de gestión al frente de la Generalitat y sugirió su pretensión de no formar un Gobierno con el PSC sino tabajar desde “la oposición”.
TRISTEZA DE PUIGDEMONT
Carles Puigdemont, con su campaña en el sur de Francia dado que está fugado de la Justicia española desde que en 2017 declaró de forma unilateral la independencia de Cataluña, ha conseguido un gran resultado al ser el segundo partido más votado y superar a ERC, cosa que no consiguió en las anteriores.
Junts asciende de 32 a 35 diputados con 100.000 votos más que en 2021 pese a haber hecho oposición desde su mansión en Bélgica y desde el escaño que logró en el Parlamento Europeo. Sin embargo, el ambiente en su cuartel general era de tristeza y cuando compareció ante la prensa en el sur de Francia reconoció que la crispación nacional le había perjudicado. Su mensaje se centró en tender la mano a ERC para reflexionar sobre las consecuencias de la “desunión” del independentismo.
En ERC asumieron los “resultados muy malos” al caer de 33 escaños a 20 y al verse superados tanto por el PSC en la izquierda como por Junts en el ámbito independentista. El resultado es demoledor para el hasta ahora presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, que no ha sabido rentabilizar la gestión realizada durante los tres últimos años al frente de la comunidad.
Los republicanos pierden en tres años 180.000 votos y más de un 7% de apoyos. Se ven superados por Junts en las cuatro provincias y vislumbran un trasvase de papeletas hacia el PSC fruto de la nacionalización de la campaña que inició el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con su carta en la que abría un periodo de reflexión de cinco días sobre si continuar en el cargo, como finalmente hizo.
EL PP MULTIPLICA POR CINCO
La alegría estaba desatada en la sede del Partido Popular, que resucita en Cataluña al multiplicar por cinco los resultados de los últimos comicios. Pasa de tres a 15 escaños en la cámara regional al triplicar el número de votos conseguidos en esta comunidad en 2021. En concreto, de 109.000 a más de 340.000.
El PP de Alejandro Fernández se convierte en la cuarta formación más votada tras PSC, Junts y ERC. Supera ampliamente todas las expectativas que le daban las encuestas y alcanzan casi el 11% de los votos. En los últimos días, parecía sentir en la espalda la amenaza de Vox, que le ganó ampliamente en la anterior cita con las urnas.
Sin embargo, el partido de Feijóo venció finalmente a su adversario de la derecha y abre una nueva etapa en Cataluña, donde aspira a ganar terreno para tratar de presentar una alternativa nacional al Gobierno de Pedro Sánchez.
Por su parte, Vox repite los 11 diputados de las últimas elecciones. Consigue 28.000 papeletas más que en 2021 pese al retroceso que ha sufrido en otros territorios en las últimas elecciones y mejora ligeramente su porcentaje de voto. Además, en Girona se quedó a apenas 500 apoyos del Partido Popular.
Las formaciones conservadoras españolistas crecen así en Cataluña, pues la legislatura pasada entre Vox, CS y PP sumaban 20 escaños y ahora entre PP y Vox van a sumar 26. En cambio, el independentismo obtiene el peor resultado de su historia porque Junts, ERC y CUP sumaron 74 diputados en 2021 y ahora apenas llegan a 59.
Desde hace más de cuatro décadas los partidos nacionalistas o independentistas siempre habían sumado más de la mitad de los escaños del Parlamento de Cataluña, aunque sólo en los últimos diez años habían unido sus fuerzas para gobernar en el intento por forzar al Gobierno central para conseguir la escisión del resto de España.
Hay que remontarse a 1980 para encontrar un resultado peor que el actual. Entonces, la CiU de Jordi Pujol ganó las elecciones con 43 diputados y Esquerra Republicana se quedó en 14. La suma de ambos entonces eran de 57 y ahora con la CUP llegan a 59.
LA FUERZA DE LOS COMUNES
Los Comunes empeoran su resultado al caer de 8 a 6 escaños en el Parlamento de Cataluña, con 14.000 votos menos. Sin embargo, en 2021 fueron irrelevantes con mayor representación y ahora son fundamentales para que Salvador Illa pueda conformar un gobierno de izquierdas en la Generalitat.
Precisamente, la formación de Jessica Albiach fue clave para convocar estas elecciones hace dos meses al oponerse a aprobar los presupuestos autonómicos que planteaba Aragonés. El presidente de la Generalitat lo tomó como un órdago y llamó a las urnas a los catalanas, que este domingo le han dado la espalda y en cambio han situado a los Comunes en una situación privilegiada para condicionar la investidura e incluso entrar en el Ejecutivo autonómico si lo desean.
La CUP también se hunde al caer de 9 a 4 años. Se deja un tercio de los votos al perder 62.000 papeletas respecto a hace tres años y ve cómo aparece otra alternativa radical independentista en la derecha. Se trata de Aliança Catalana, que da la sorpresa al entrar en el Parlamento de Cataluña con 2 representantes y más de 117.000 votos.
La peor noticia es para Ciudadanos, que después de tres lustros siendo relevante en Cataluña desaparece de la cámara regional con apenas 22.000 votos y queda incluso por debajo del Pacma. Sin embargo, su candidato, Carlos Carrizosa, salió ante la prensa orgulloso y anunció que si hubiera una repetición electoral en los próximos meses volverá a presentarse.
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