MADRID, 01 (SERVIMEDIA)
4.272 ciudadanos se acercaron este viernes al Congreso de los Diputados en la primera de las dos Jornadas de Puertas Abiertas de este año de la Cámara Baja, que, como cada comienzo de diciembre, en vísperas del aniversario de la aprobación en referéndum de la Constitución, permite a las personas que lo deseen visitar y recorrer sus instalaciones.
Los visitantes de la edición de 2023, que es la vigésimo sexta desde que se inauguraron en 1997, no están padeciendo las kilométricas colas que acostumbran a generarse en otras jornadas similares. Ello se debe a que, por primera vez, este año se ha introducido la petición de cita previa para cada solicitante, con un máximo de tres acompañantes y hasta cinco menores de 14 años, de forma que todos los asistentes ya estaban acreditados cuando entraron en el Congreso (los mayores de 65 años no han tenido que citarse de antemano).
La presidenta de la Cámara, Francina Armengol, abrió la Puerta de los Leones y dio la bienvenida a los visitantes más madrugadores a esa hora, y a partir de ahí fue constante el reguero de ciudadanos que siguieron el recorrido habilitado, con inicio y explicación previa en el Salón de Pasos Perdidos, y se internaron en las dependencias del Congreso, especialmente el Hemiciclo, en cuyos escaños pudieron sentarse, y en las estancias aledañas. También se interesaron por los retratos de expresidentes del Congreso que se exhiben en la primera planta del edificio de Palacio.
En el Hemiciclo y los pasillos anexos pudieron saludar, intercambiar unas palabras y hacerse fotos con sus políticos favoritos. Por parte del Partido Popular, estuvieron, entre otros, su nuevo portavoz en el Congreso, Miguel Tellado; el del partido, Borja Sémper; el vicepresidente segundo de la Mesa de la Cámara Baja, José Antonio Bermúdez de Castro; y el diputado Guillermo Mariscal.
Del PSOE, sin duda el más solicitado para posar junto a ciudadanos fue su portavoz, Patxi López, a quien una pareja incluso quiso mostrarle a su bebé, que le contempló atónito desde su carrito. Ya pasadas las 13.00 horas, le tomó el relevo el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, a quienes varios visitantes también le pidieron hacerse fotos juntos y le desearon “mucho ánimo”. La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo, habitual de estas citas, fue otra diputada socialista que no faltó a la primera jornada de puertas abiertas.
VOX Y SUMAR
De Vox se pudo ver a su portavoz, Pepa Millán, y su vicepresidente y diputado, Javier Ortega Smith, quienes también atendieron a las peticiones de sus simpatizantes de inmortalizar gráficamente el encuentro. Por el contrario, llamó mucho la atención la práctica total ausencia de representantes de Sumar, de quienes sólo hizo acto de presencia en el Hemiciclo el diputado de la Chunta Aragonesista, Jorge Pueyo.
Dos de las diputadas y dirigentes de Podemos, Ione Belarra y Lilith Verstrynge, también pasaron esta mañana por el Congreso, pero no se acercaron al edificio de Palacio, donde se encuentra el Hemiciclo y por el que circularon permanentemente la mayor parte de los ciudadanos. Allí tocó también varios de sus temas el grupo de rock indie Izal, invitado por Rne al programa especial que realizó en una mesa instalada en el salón de plenos.
Muchos de los ciudadanos que acudieron hoy al Congreso eran reincidentes y ya habían asistido en ediciones anteriores. Una prueba inequívoca de ello es que una de las preguntas recurrentes fue “¿Dónde está el caldito?”. Tradicionalmente, la Cámara Baja, ante las bajas temperaturas de esta época del año, obsequiaba a sus visitantes con un vasito de consomé. Sin embargo, este detalle fue una de las buenas costumbres que se llevó consigo la epidemia de covid-19.
El Congreso estuvo abierto este viernes hasta las 19.00 horas y volverá a permitir la entrada de visitantes mañana sábado. El año pasado fueron más de 6.000 los ciudadanos que aprovecharon la oportunidad en los dos días que duró también. Entonces, cerró simbólicamente las puertas abiertas el exdiputado del PP Adolfo Suárez Illana, el hijo del primer presidente de la democracia española, que anunció pocos días antes que dejaba la política.
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