MADRID, 01 (SERVIMEDIA)
El Consejo de Ministros aprobó este martes el Real Decreto sobre inscripción de las personas de nacionalidad española en los Registros de Matrícula de las Oficinas Consulares en el extranjero, con el propósito de digitalizar las gestiones.
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, José Manuel Albares subrayó que el Real decreto aprobado “es una pieza esencial del proceso de digitalización consular que sigue avanzando a lo largo de este año 2024 y que va a finalizar al terminar el año 2025”.
“La implantación se va a realizar dada su complejidad de manera progresiva durante el plazo máximo de un año”, explicó el ministro, que destacó que el Registro de Matrícula Consular “que recoge la información de los españoles en el extranjero, es una herramienta clave para que los españoles que se encuentran fuera de nuestro país”.
Los casi 3 millones de españoles que viven en el exterior tendrán más facilidad para ejercer, por ejemplo, su derecho de voto, pero además “también va a facilitar a los servicios consulares poder dar protección y asistencia consular aquellos españoles que están fuera y que lo necesitan una labor que como saben está la orden del día dada la inestabilidad que vivimos en el mundo actual”.
FACILITAR GESTIONES
Además, aseguró Albares, el nuevo registro va a evitar el desplazamiento físico para realizar determinados trámites que podrán realizarse de manera telemática, tales como el alta, la modificación, o la baja de datos.
Permitirá en concreto crear un número de identificación consular central “que va a ser único e invariable” y que facilitará el resto de trámites. Asimismo, los ciudadanos van a poder acceder a una sede electrónica “donde van a poder encontrar una carpeta consular igual que hay una carpeta de la Administración General del Estado”.
El nuevo registro, explicó el ministro, “no va a sustituir, sino que se va a sumar y va a mantener muchas características del Registro de Matrícula Consular anterior”.
Se mantendrá la posibilidad de que quien quiera puede seguir realizando los trámites presencialmente, y también se va a mantener la distinción entre las personas residentes en el exterior, “para quien la inscripción va a seguir siendo obligatoria y los no residentes para quien va a ser opcional”.
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