MADRID, 18 (SERVIMEDIA)
La secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra, aseguró este sábado que su formación sigue con “máxima preocupación” y “atención” la decisión del Gobierno de activar el relevo de José María Álvarez-Pallete al frente de Telefónica para exigir “todas las explicaciones y todas las responsabilidades que sean necesarias”.
Así lo indicó Gamarra durante su intervención en un acto de entrega de carnés a afiliados del PP de Barcelona, después de que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), por medio de la que el Gobierno tiene ya en su poder el 10% de las acciones de Telefónica, comenzase a actuar para relevar a Álvarez-Pallete como presidente de la teleco.
Gamarra denunció que para el “sanchismo”, los fines de semana “también son momentos en los que intervenir, actuar, colonizar”. “En el PP tenemos máxima preocupación porque al Gobierno no le basta con colonizar las instituciones públicas, ahora quiere también colonizar empresas privadas”, denunció.
Lo lleva a cabo, destacó, “haciendo oposición a programas de televisión, a altos directivos de multinacionales”. “Nada queda fuera del interés del PSOE para extender el sanchismo, aunque sea a costa del prestigio de una de las compañías que es marca España en el exterior y que es líder internacional también en su sector”, dijo.
En este sentido, dejó claro que el PP sigue esta situación de Telefónica “con preocupación y atención para exigir todas las explicaciones y todas las responsabilidades que sean necesarias”. “Trabajamos mañana, tarde y noche para acabar con el sanchismo y abrir una nueva etapa de esperanza para España y para Cataluña”, espetó.
CORRUPCIÓN
En su discurso, Gamarra subrayó que el presidente del Gobierno “vive emparedado entre los escándalos y su fragilidad parlamentaria” y deploró que “la montada de pruebas e indicios” contra el fiscal general del Estado, Álvaro García-Ortiz, “ha seguido creciendo” en estas últimas semanas.
A su juicio, García-Ortiz “debería haber dimitido ya” y volvió a exigir que lo haga. Además, afeó que la ministra Pilar Alegría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros celebrada esta semana hiciera una “defensa férrea” del fiscal general “atacando la separación de poderes, a los jueces” y “al sistema judicial”.
Según Gamarra, “no estaba defendiendo al fiscal general, sino que se estaban defendiendo a sí mismos porque el fiscal general ha actuado políticamente contra una adversaria política de Pedro Sánchez, bajo el dictado de Moncloa” y “las pruebas también señalan a Moncloa, por eso es por lo que no quieren que dimita, para que actúe como un escudo de protección para Pedro Sánchez”.
“ULTIMÁTIM” DE PUIGDEMONT
También hizo referencia al “ultimátum” que hizo ayer el líder de Junts, Carles Puigdemont, al PSOE al anunciar que suspendía las negociaciones en temas sectoriales y le exigía una reunión en Suiza con el mediador internacional para hacer balance del cumplimiento del acuerdo firmado entre ambas formaciones.
Se trata, según Gamarra, de “otra humillación que ha puesto a Moncloa y Ferraz a buscar vuelos Madrid-Suiza”. Desde ayer, destacó, “nos han parado de reservar viajes y vuelos” y esto “no significa otra cosa que prorrogar un tiempo más su estancia en el poder a costa de todos los españoles y de la democracia”.
Por ello, manifestó que Sánchez lo que debería estar haciendo es buscar billetes “para ir a Valencia, echar una mano y ponerse al servicio de los valencianos”, algo que “no ha hecho en los dos últimos meses porque no ha pisado Valencia”. “Tenemos un Gobierno que está absolutamente muerto”, denunció.
Justificó esta frase señalando que el Ejecutivo de Sánchez “no puede aprobar Presupuestos Generales del Estado”, leyes y reales decretos y “no tiene agenda política”, sino que “la única agenda que tiene es la judicial y la de la supervivencia en el poder”.
“SANCHISMO”
En este acto participó también la portavoz del PP en Europa, Dolors Montserrat, quien deploró que la “lógica” del “sanchismo” es “ni libertad, ni derechos, ni transparencia, ni legalidad, solo existe Sánchez”. Pese a ello, dejó claro que “el sanchismo va a terminar y vamos a construir un país donde el fiscal general no tenga ni siquiera una sospecha de corrupción”.
Un país, continuó, donde “no se aplaudan dictaduras como la de Maduro ni se insulte a los verdaderos demócratas, donde aprobar leyes y presupuestos no sea una excepción”, donde el Gobierno “no viva sometido a los caprichos de los independentistas golpistas y los filoetarras” y donde “no se pisoteen nunca más ni la Constitución ni el Estado de derecho”.
Finalmente, el presidente del PP de Cataluña, Alejandro Fernández, manifestó que en estos tiempos en los que “todo el mundo se dedica a dividir” y en los que “parece que enfrentar y polarizar tiene rédito electoral” no se puede “renunciar” a “algo fundamental que fuimos capaces de construir en 1978, que es la concordia entre todos los españoles”.
- Te recomendamos -