MADRID, 28 (SERVIMEDIA)
El juez Manuel García Castellón considera que “no existe indicio” de que el actual líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, participara en julio de 1997, desde la dirección de ETA, en el secuestro y asesinato del concejal del PP de Ermua Miguel Ángel Blanco.
El titular del juzgado de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional se refiere a esta cuestión en un auto en el que responde a la petición de la Asociación Dignidad y Justicia para investigar a Otegi por el asesinato de Blanco.
En la resolución a la que ha tenido acceso Servimedia, García Castellón rechaza realizar una investigación “genérica” sobre Otegi, ya que “no existe indicio” de su implicación en el asesinato de Blanco y, de existir, sería una “responsabilidad prescrita”.
El instructor da esta respuesta a una petición que Dignidad y Justica presentó en julio pasado, en que se cumplieron 25 años del secuestro y asesinato de Blanco. Esta asociación solicitó indagar en el hecho de que en julio de 1997 se pusiera bajo vigilancia a Otegi para determinar si conocía donde escondía ETA al edil del PP.
IMPUTACIÓN “ILUSORIA”
Estas diligencias se abrieron a raíz de lo dicho en una conversación por la esposa del etarra Salvador Ormaza Corral. Esta mujer sugirió que su marido y Otegi, como miembros de la dirección de ETA, podrían conocer donde tenía la banda secuestrado al concejal de Ermua. Las pesquisas abiertas a partir de estas manifestaciones no dieron ningún resultado ni permitieron localizar a Blanco.
No obstante, Dignidad y Justicia pedía a García Castellón que solicitase la investigación sobre Otegi que se realizó en julio de 1997 para ver si podía profundizarse en la eventual implicación del líder de EH Bildu en el asesinato del edil de Ermua.
Sin embargo, el juez concluye que se le pide una “genérica investigación” sobre Otegi “cuando no existe indicio” de su participación en este crimen. Se añade que se trataría de una “responsabilidad prescrita”, por lo que resulta “ilusoria” su imputación ahora cuando es algo que tampoco se produjo en su momento.
Se explica, además, que el ahora líder de EH Bildu era en julio de 1997 aforado y que, aún así, se le decidió investigar sin elevar la causa a un tribunal superior dada la urgencia para tratar de encontrar con vida al edil de Ermua.
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