MADRID, 27 (SERVIMEDIA)
El Gobierno presume de la “solidez y resiliencia de la economía española en un contexto internacional tan complicado”, tras conocerse los datos de avance de Contabilidad Nacional publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que arrojan que la economía española creció un 5,5% en 2022.
Desde La Moncloa destacan que “España funciona” frente a “los profetas del apocalipsis”, que soñaban con “profundas crisis”, toda vez que acaba 2022 “con un fuerte crecimiento económico, la inflación más baja de toda Europa” y “niveles récord de empleo”.
Para el Gobierno, que el PIB crezca en 2022 un 5,5%, “muy por encima de las previsiones” del propio Ejecutivo y de los principales organismos nacionales e internacionales, es la evidencia de la “solidez y resiliencia de la economía española en un contexto internacional tan complicado”.
Pese a, dicen en el Ministerio de Economía, un contexto internacional de “gran incertidumbre, marcado por las consecuencias de la guerra de Rusia en Ucrania”, el crecimiento ha mantenido signo positivo en el cuarto trimestre, con un avance del 0,2% respecto al trimestre anterior.
A lo que suman que la “inflación se ha reducido en 5 puntos en los últimos 5 meses”, por las medidas aplicadas por el Gobierno para “doblegar la curva de los precios”.
Y que se sigue “protegiendo” a la mayoría social, al recordar a los “más de 10 millones de pensionistas que ven garantizado su poder adquisitivo” con la reciente subida del 8,5% de las pensiones, con arreglo al IPC, que se traduce en que “la pensión media de jubilación se incrementa en 108 euros al mes”.
En este punto, el Gobierno aprovecha para comparar cómo sería la situación de los pensionistas si se aplicase el método de cuando estaba el Partido Popular al frente del Ejecutivo.
Así las cosas, el Gobierno de Pedro Sánchez presume de su alza de las pensiones frente al incremento de 2,39 euros que se habría aplicado con el sistema del PP, y ensalza que ahora su política, “en la práctica, equivale a una paga adicional”.
Además, entre los datos que destaca el Gobierno para mostrar la robustez de la economía española está que la demanda interna ha “aguantado bien el impacto de la inflación y de la subida de costes, con un crecimiento del consumo privado y de la inversión por encima del 4%”.
Mientras que el sector exterior ha tenido una contribución de 2,6 puntos al crecimiento, aún en un entorno de “ralentización” de los principales socios comerciales, gracias al “dinamismo de las exportaciones, que sigue reflejando la competitividad de las empresas españolas”.
Por último, el Ejecutivo insiste en que la última Encuesta de Población Activa (EPA) acredita que el primer año de la reforma laboral se salda con cerca de 20,5 millones de ocupados, 280.000 empleos más y máximos históricos en contratación indefinida y reducción de la temporalidad, y que la productividad/hora ha recuperado “prácticamente” los niveles previos a la pandemia.
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