MADRID, 26 (SERVIMEDIA)
La Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados aprobó este miércoles una proposición no de ley (PNL) del grupo parlamentario de Vox para instar al Gobierno a reconocer jurídicamente que los miembros de las Fuerzas Armadas desempeñan una profesión de riesgo.
Con 18 votos a favor, 17 en contra y una abstención, la Comisión de Defensa de la Cámara Baja dio luz verde a la PNL de Vox para instar al Gobierno a reconocer que las Fuerzas Armadas son una profesión cuyo ejercicio lleva aparejado “un gran riesgo real”, y corregir el hecho de que no se encuentran incluidas en el elenco de las profesiones catalogadas como de riesgo.
“Es de justicia que los militares sean incluidos en este listado por analogía con el riego que asumen las otras profesiones que en él se contemplan”, añade.
En la defensa de la iniciativa, el diputado de Vox Alberto Asarta explicó que, tras haber estado 45 años en las Fuerzas Armadas, “nunca me había planteado esta cuestión”, y consideró que “quizá la razón se encuentre en que para los militares el riesgo es algo que va implícito en la profesión y que se asume con naturalidad”.
En España, dijo Asarta, según la Seguridad Social, las profesiones catalogadas como de riesgo son “los mineros, personal de vuelo de trabajos aéreos, trabajadores ferroviarios, artistas, cantantes, bailarines y trapecistas, profesionales taurinos, bomberos y policías locales”.
Para el diputado de Vox, “sin ánimo de restar mérito a ninguna de estas profesiones”, llama la atención que “no estén incluidas como profesiones de riesgo la Guardia Civil, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas”. Para el diputado, “no resultaría nada complicado” aplicar las ventajas de ser declarada profesión de riesgo “después de establecer un catálogo con los puestos, unidades y misiones que se consideren de riesgo y la reducción del tiempo para obtener la jubilación anticipada en función del tiempo permanecidos en dichos destinos”.
Asarta admitió que dentro de las Fuerzas Armadas no todos los destinos son de riesgo, pero alegó que sí hay una lista larga de puestos que incluyen a “los paracaidistas, los submarinistas, los pilotos y tripulaciones de aeronaves, las tripulaciones de vehículos acorazados y mecanizados, los desactivadores de explosivos o el personal destacado en operaciones en el exterior”.
“La regla primera y principal base de la moral militar y en la que se apoyan el resto de las reglas éticas y morales que condicionan la vida de los miembros de las Fuerzas Armadas consiste en la disposición permanente para defender a España incluso con la entrega de la propia vida”, subrayó.
De ello se deriva, dijo, que en su trabajo “arrastran con frecuencia graves dificultades y peligros, hasta el punto de que este es el gremio de servidores públicos con mayor siniestralidad laboral”. Concretamente, detalló, “desde el año 2011, 197 militares han muerto en acto de servicio y 2.312 han sido heridos”.
Por parte de Sumar, Txema Guijarro afirmó que la iniciativa de Vox le causaba sorpresa “porque no provoca una reacción casi alérgica de nuestra parte”, debido a que “recoge un cierto sentido común de los tiempos y efectivamente pocos en esta sala podrían dudar de que la profesión militar comprende ciertos riesgos de las que todas y todos somos muy conscientes”.
No obstante, consideró que “la reforma que tiene que haber en la carrera militar” ha de contemplar “no solo las cuestiones de riesgo, que también, sino todo lo que tiene que ver con los desplazamientos dentro del país, fuera del país, en fin, el hecho de que los hombres y mujeres de nuestras fuerzas armadas están siempre sometidos a un régimen de disponibilidad que debería estar de alguna manera recogido en sus condiciones laborales”.
Por el PSOE, Mamen Sánchez Díaz dijo a la bancada de Vox que “frivolizáis mucho con este tema”, ya que, sostuvo, “es un tema muy complicado y no es una decisión política”.
La diputada socialista alegó que no es una decisión solo que tenga que tomar el Ministerio de Defensa, sino que precisa del trabajo de más ministerios, ya que “sobre todo es una decisión política y jurídica, que aún no se le ha dado una solución”. “El problema no es cómo le llamemos, no es que si creemos que es de riesgo o no, el problema se llama régimen de cotización, si cotiza por la Seguridad Social o si cotiza por la clase pasiva”, recalcó.
Por el Partido Popular, que fue el otro grupo que apoyó la PNL, el diputado Javier Celaya Brey reconoció que la argumentación de Vox era “impecable”, ya que, en su opinión, que la profesión militar no esté considerada como profesión de riesgo “no tiene ningún sentido”. “De hecho, es una profesión que compromete al que la profesa a servir a España hasta el extremo de dar la vida si fuera necesario”, remarcó.
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