MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
El comisario Eugenio Pino, que fue director adjunto operativo (DAO) de la Policía Nacional entre 2012 y 2016, negó este martes en el Congreso de los Diputados que con el Gobierno de Mariano Rajoy se montara una trama parapolicial para perseguir a políticos independentistas catalanes y frenar así el ‘procés’.
Pino compareció ante la comisión de investigación sobre la llamada ‘Operación Cataluña’, donde se acogió a su derecho a no declarar sobre la mayoría de las cuestiones planteadas por los grupos parlamentarios.
El ex DAO afirmó que la Policía actuó de acuerdo con “los principios básicos de actuación de la Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad” y lo establecido para la Policía Judicial en la Ley Orgánica del Poder Judicial.
“Hicimos lo que corresponde y lo que ordena la ley”, aseguró Pino, quien insistió en que no existió ninguna trama parapolicial para perseguir a nadie en Cataluña por motivos ideológicos.
El exalto cargo policial, que se enfrenta a varias investigaciones judiciales, evitó pronunciarse sobre la mayoría de preguntas alegando que hay procesos abiertos pendientes de resolución.
Pino tiene una condena no firme a un año de prisión por el caso del ‘pendrive’ con información sobre la familia de Jordi Pujol, al tiempo que está pendiente de juicio en el ‘caso Kitchen’ sobre el presunto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas.
Además, recientemente ha sido citado como investigado por el supuesto espionaje a parlamentarios de Podemos cuando era DAO de la Policía.
LOGROS DE LOS FONDOS RESERVADOS
Asimismo, defendió el uso de los fondos reservados cuando era alto cargo, al tiempo que indicó que se cumplió “a rajatabla” la normativa específica que los regula y que “ha dado muy buenos resultados” en muchas operaciones policiales.
Pino negó tener capacidad de investigación o de tomar decisiones por su cuenta, alegando que tenía “un mando político por arriba, otro mando político por arriba y otro mando político por arriba”.
La comparecencia, que duró cerca de una hora, estuvo marcada por momentos de tensión entre el exalto cargo policial y algunos diputados, especialmente con el portavoz de ERC, Gabriel Rufián.
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