MADRID, 18 (SERVIMEDIA)
El líder de Vox, Santiago Abascal, aseguró que es “imprescindible” que quien convoca un referéndum para “destruir” la unidad de la nación sea “penalizado y perseguido”, así como recuperar los delitos de sedición y malversación que “ha derogado o suavizado” el Gobierno, y abogó por “buscar herramientas para que el Estado pueda defenderse de los golpistas”.
Así lo indicó Abascal en una entrevista en Servimedia, donde, preguntado sobre cuáles de las promesas del PP, como recuperar delitos como la convocatoria de un referéndum o el modelo lingüístico, que Vox comparte, le obligaría a cumplir para llegar a un acuerdo de Ejecutivo, señaló que “todas”.
“Todo aquello a lo que el PP se ha comprometido y además Vox comparte formará parte de los acuerdos de gobierno, tendrá que cumplirse”, señaló Abascal, quien aseguró que su partido no estará en un Ejecutivo que “ceda” ante los separatistas y que “no defienda la libertad de elección lingüística de los padres en todo el territorio nacional”.
Al respecto, Abascal lamentó que la penalización de los referéndum ilegales “que en su momento aprobó el Gobierno de Aznar”, lo “despenalizó” el de José Luis Rodríguez Zapatero y, posteriormente, con Mariano Rajoy en el Ejecutivo, se dejó “como estaba, despenalizado”.
En este sentido, criticó que España ha contado los últimos cuatro años con un Gobierno “entregado a los enemigos de España”, a quienes “han atacado el orden constitucional” y a quienes “han asesinado” y cuyos “aliados” son “todos los regímenes narcoterroristas de Hispanoamérica”. “Por lo tanto, hace falta un cambio de rumbo radical”, garantizó.
En concreto, apostó por un Ejecutivo que “proteja” a los españoles de los que quieren acabar “con sus libertades”, “destruir” la “unidad” y de “aquellos que han asesinado”. “No sirve de nada echar a los socialistas para que nosotros nos sentemos en los sillones en los que estaban sentados y nos dediquemos únicamente a las cuentas públicas”, subrayó.
Abascal explicó que Vox propone “un cambio profundo” y “radical” porque “hay que ir a la raíz del problema”, que es que el Gobierno estaba “atado de pies y manos” por “los enemigos” de España y que, “en palabras del vicepresidente saliente”, en referencia a Pablo Iglesias, “ha incorporado a ETA a la dirección del Estado”. “Eso es algo que es inaceptable para nosotros”, agregó.
GOBIERNO “ILEGÍTIMO”
Asimismo, Abascal señaló que Vox se presenta al 23-J con el objetivo de que el modelo de Castilla y León y Comunidad Valenciana se repita a nivel nacional, pero al “inverso”, con su formación como partido mayoritario. “De hecho nos presentamos a las elecciones con ese objetivo”, añadió.
“Sabemos que son los españoles los que tienen que decidir. Nosotros aceptaremos el veredicto de las urnas y estamos dispuestos a construir una alternativa junto con aquellos que los españoles decidan frente a lo que ha significado un Gobierno ilegítimo”, aseguró el líder de Vox durante la entrevista.
Al hablar de “ilegítimo”, aclaró, se refiere a que el Ejecutivo “ha roto la principal regla que debe respetar un político”, que es la de “decir la verdad”. “Cuando un político se presenta a las elecciones y miente sobre sus pactos, a partir de ese momento las decisiones que toma el Parlamento no son decisiones soberanas del pueblo español”, agregó.
A su juicio, son decisiones de “una casta política” que “ha engañado” a los españoles, “ha pactado” con aquellos que había prometido “no pactar”. Por lo tanto, son decisiones “ilegítimas”, “legales” pero que “carecen de toda la legitimidad democrática que un político debería tener”. “Nosotros a veces podemos parecer muy duros, muy contundentes, pero no queremos que nadie nos pueda decir que no estamos diciendo la verdad”, destacó.
PACTOS
Como ejemplo, expuso que Vox, con el tema de los pactos postelectorales, no tiene “otra alternativa” que “respetar” a sus votantes porque ha dicho durante la campaña electoral “por activa y por pasiva” que quien quisiese que entregase los votos recibidos como “un cheque en blanco” a otro partido que votase a esa fuerza política, pero “que no nos votase a nosotros”.
Incluso aventuró que si en un momento dado algún dirigente del PP pudiera intentar convencer a Vox de un “acuerdo impropio”, aunque le convenciera, su partido no tendría “opción” ni “ninguna posibilidad” porque “hemos empeñado nuestra palabra en las elecciones y es lo más valioso que tenemos”.
En este sentido, Abascal comentó que si los electores empiezan a ver que Vox “se comporta como el resto de los partidos políticos”, es decir, que “dice una cosa durante las elecciones y otra después”, entonces su partido “no tendrá futuro” y los españoles “harían bien en castigarnos”.
“Nosotros no queremos seguir ni la estela de Sánchez mintiendo sobre los pactos ni la estela del señor Rajoy cuando prometió una cantidad tremenda de reformas y de derogaciones que luego no se produjeron. Nosotros queremos mostrar que aquello que decimos, si tenemos la mayoría suficiente, intentamos ponerlo en marcha”, concluyó.
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