VIGO, 13 (EUROPA PRESS)
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, y el delegado de Zona Franca, David Regades, han firmado este viernes un protocolo para dejar constancia de su intención de recuperar el ámbito de la Panificadora, en pleno centro de la ciudad, y a la espera de que se apruebe el nuevo Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) y la administración local pueda llevar a cabo las expropiaciones necesarias para la rehabilitación de este entorno.
Caballero y Regades han escenificado en un acto en la Praza do Rei, con el emblemático edificio de fondo, el acuerdo de ambas administraciones para recuperar un ámbito urbanístico que lleva décadas abandonado y que ha pasado por diversas vicisitudes urbanísticas.
El propio regidor olívico ha reconocido que existió un protocolo anterior con Zona Franca para la reforma de ese entorno (aprobado por el Pleno en 2016), pero no se llegó a materializar por “cuestiones urbanísticas”: el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anuló la modificación puntual del PEPRI que amparaba esa actuación, por lo que la modificación tuvo que incorporarse en la redacción del nuevo Plan General de Ordenación Municipal, que se aprobará de forma definitiva “pronto”.
Por otra parte, el alcalde ha recordado que anteriores gobiernos contemplaron para ese ámbito “inmensas edificabilidades” que impedían la puesta en valor de ese patrimonio industrial. “Nuestro gobierno quiere rehabilitarlo manteniendo la esencia y que sea para la ciudad. No queremos que sea para inmensas torres y para pelotazos, como antes se había trazado”, ha proclamado Caballero, que ha puesto en valor la participación de Zona Franca, que se encargará de financiar las obras.
Según ha subrayado, la llegada de Pedro Sánchez al Gobierno de España y de Regades a Zona Franca supuso “una nueva forma de actuar” que se ha visto en proyectos e inversiones en la ciudad por parte del organismo estatal. “Éste es el más notable y el más simbólico”, ha proclamado.
Por su parte, David Regades ha subrayado el compromiso de Zona Franca con la recuperación de este espacio emblemático, abandonado desde 1980. “Tuvo que llevar un alcalde con la sensibilidad de Abel Caballero para recuperar los edificios y para que quede en la historia de la ciudad su huella industrial”, ha aseverado.
El protocolo suscrito este viernes, que no tiene “contenido obligacional alguno”, establece el compromiso de ambas por recuperar el ámbito y establece las bases de la colaboración interinstitucional. Las condiciones, inversión, plazos y otros detalles deberán quedar fijados en un convenio que, según la previsión del propio Regades, podría estar firmado antes de que finalice el año.
Según se recoge en el documento, previo acuerdo entre el Ayuntamiento y Zona Franca en el convenio se recogerán las obligaciones de ambas partes y las acciones que la administración local deba realizar para poner a disposición del organismo estatal el espacio de actuación, de más de 7.000 metros cuadrados, incluyendo las edificaciones de la Panificadora y los inmuebles situados en los números 26 y 28 de la calle Santiago.
La idea de Zona Franca es poder licitar el proyecto en el primer semestre de 2025; entre tanto, y tras la aprobación del PGOM, el Ayuntamiento deberá acometer las expropiaciones necesarias para poner a disposición los terrenos.
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