El alcalde de Vilagarcía asegura que “la Xunta tiene que sentarse con todas las partes e intentar llegar a un entendimiento cuanto antes”
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 14 (EUROPA PRESS)
El delegado del Gobierno en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, ha instado al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, a ponerse “manos a la obra” para solucionar el conflicto de la mejilla.
Así lo ha manifestado este viernes al ser preguntado por la protesta protagonizada el jueves por ‘bateeiros’ en Santiago de Compostela en el marco del conflicto que mantienen con los ‘percebeiros’ por la extracción de mejilla y en la que se registraron cargas policiales.
Sobre la actuación policial, Besteiro, que ha recordado que hay 16 policías heridos, se ha remitido a la información facilitada el jueves por la Subdelegación del Gobierno en A Coruña. En concreto, la Subdelegación señaló que los ‘bateeiros’ “intentaron acceder al edificio trepando por la verja”. Esto motivó, según su relato, que agentes de la policía nacional intentasen “impedir esta acción” y como respuesta, según la Subdelegación del Gobierno, “se comienzan a lanzar piedras y ramas contra la Policía y a incendiar contenedores”.
De este modo, Besteiro se ha limitado a señalar que lo que hay que hacer es “intentar resolver el conflicto” sobre una cuestión en la que la competencia es de la Xunta y que afecta a “muchísimas familias”. “Insto a que esa mediación, ese ejercicio de la competencia sea eficaz y solucione el problema”, ha insistido Besteiro, que se ha referido también al “importante coste económico” que tiene este conflicto.
El delegado del Gobierno en Galicia se ha pronunciado de este modo en declaraciones a los medios tras reunirse con el presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) y alcalde de Vilagarcía de Arousa, Alberto Varela.
Precisamente, el regidor aurousano ha considerado que el conflicto se produce porque “la medicación” de la Xunta “no está funcionando” y ha considerado que las administraciones deben estar para “solventar problemas” y “no para crearlos”.
“Había una convivencia pacífica desde hacía tiempo y las decisiones –del Gobierno gallego– no ayudaron a esa convivencia. La Xunta tiene que sentarse con todas las partes e intentar llegar a un entendimiento cuanto antes”, ha sostenido.
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