La portavoz y responsable de Relaciones Institucionales de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, ha destacado que es la educación el verdadero progreso y el elemento de palanca de cambio y transformación que tiene la región y ha tenido a lo largo de sus 35 años de autonomía.
Gil Rosiña ha realizado estas declaraciones este sábado en Calamonte, donde ha participado en la Gala de Entrega del XXVIII Certamen Calamonte Joven, un acto que también ha contado con la presencia del director de la Editora Regional de Extremadura y coordinador del Plan de Fomento de la Lectura, Francisco Javier Amaya, entre otras autoridades.
Ha valorado el esfuerzo realizado por este municipio pacense para poner en marcha estos premios que celebran este año su 28 edición, al tiempo que ha indicado que también se conmemora este 2018 el 35 aniversario del Estatuto de Autonomía de Extremadura.
La portavoz del Ejecutivo extremeño ha subrayado que en estos más de treinta años la apuesta constante de las instituciones ha sido la educación, lo que ha posibilitado dejar atrás las altas tasas de analfabetismo con las que contaba la comunidad en esos primeros años de autonomía.
“La región ha progresado porque allí donde se tomaban las decisiones se priorizaba la educación para que ésta no dependiera de la cuenta corriente y capacidad económica de las familias”, ha apuntado Gil Rosiña, quien ha considerado que es precisamente la educación la que ha posibilitado la transformación que Extremadura ha experimentado en los últimos años.
Isabel Gil Rosiña ha reconocido el trabajo de los primeros alcaldes, quienes además de dotar de infraestructuras necesarias a los municipios, como las redes de saneamiento, supieron llenar de contenidos, también culturales, las instalaciones que se iban construyendo.
LA EDUCACIÓN, UNA PRIORIDAD
En este sentido, ha destacado la programación cultural de Calamonte y su universidad popular, al tiempo que ha recordado algunas acciones que el Ejecutivo regional va a poner en marcha y que tienen prioridad la educación: la bonificación de la matrícula de los estudiantes de la Universidad de Extremadura y la extensión de la educación gratuita a la edad infantil.
“No podemos parar, no podemos dejar de seguir apostando por la educación en Extremadura porque ha sido el verdadero progreso y palanca de cambio y transformación de esta tierra”, ha aseverado la portavoz de la Junta de Extremadura.
Gil Rosiña ha concluido que es preciso también trabajar desde las instituciones para retener el talento de los jóvenes, al tiempo que ha considerado que certámenes como el de Calamonte contribuyen no solo a retenerlo, sino también a reconocerlo.
La portavoz del Ejecutivo regional ha valorado especialmente el premio concedido a los mejores expedientes académicos de Bachillerato, un galardón, ha concluido, que reconoce el esfuerzo y el trabajo de los estudiantes y de sus familias.
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