MÉRIDA, 14 (EUROPA PRESS)
El sindicato UGT ha subrayado que pese a un nuevo descenso del IPC en noviembre la inflación subyacente se mantiene “elevada” reflejando el “efecto contagio” en los bienes y servicios básicos de los hogares extremeños.
UGT atribuye esta ralentización del crecimiento de la tasa general al comportamiento de los precios de la electricidad, que han descendido como consecuencia de las medidas para limitar del precio del gas y reducir las tarifas eléctricas.
Medidas que el sindicato valora positivamente esta política, en la que los mecanismos de control de precios “reducen efectivamente los precios en beneficio” de todos.
Sin embargo, el hecho de que la inflación subyacente siga siendo “elevada” sustenta “la persistencia del efecto contagio, ya que continúa la presión al alza sobre el resto de bienes y servicios básicos de la cesta de la compra”.
El resultado es que “muchas de las grandes empresas se están aprovechando” de la situación actual para “aumentar los márgenes de beneficio, haciendo que los precios se disparen hasta niveles desorbitados”.
Esto está “provocando una caída del poder adquisitivo de los hogares extremeños, donde la clase trabajadora se ve cada día más empobrecida”, indica en una nota de prensa.
Por este motivo, UGT Extremadura reclama la implementación de medidas para regular y sancionar las “actividades especulativas de las empresas oligopólicas”.
Asimismo, señala el sindicato, la patronal debe tener la “previsión y el compromiso” de alcanzar un “acuerdo global que distribuya equitativamente los costes de la inflación, moderando la acumulación desproporcionada de beneficios”.
Para ello, UGT Extremadura continúa manifestando la necesidad de establecer subidas salariales de forma general; incluido el SMI, “sin amenazar” el poder adquisitivo de los trabajadores.
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