BADAJOZ, 21 (EUROPA PRESS)
El Consorcio para la Gestión de Servicios Medioambientales de la Diputación de Badajoz (Promedio) instalará equipos automatizados de medición de caudales y de calidad de agua en captaciones, depósitos y redes para optimizar la gestión de los abastecimientos en 11 localidades de la provincia pacense.
La Plataforma de Contratación del Sector Público ha publicado la licitación de las obras por 971.783,21 euros en tres lotes distribuidos por tipologías de actuación.
El plazo de presentación de ofertas concluye el próximo día 3 de septiembre, según informa en nota de prensa la Diputación de Badajoz.
Esta actuación se enmarca dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, financiada por la Unión Europea – Next Generation EU, y forma parte del proyecto Digi2Rural, una de las 30 iniciativas aprobadas a nivel estatal en los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) para la digitalización del agua.
Los 11 municipios que se verán beneficiados de esta inversión agrupan en total 26.000 habitantes y son La Coronada, Cheles, Fregenal de la Sierra, Fuenlabrada de los Montes, Garbayuela, Herrera del Duque, Higuera la Real, Hornachos, Puebla de Obando, Puebla de Sancho Pérez y Siruela.
Así, una de las cuestiones “fundamentales” a la hora de gestionar de forma eficiente una red de abastecimiento es el control de la cantidad y de la calidad de agua que recorre todo el sistema.
Según explica el diputado de Promedio, Francisco Buenavista, “la mejor solución para saber cuánta agua se capta y se trata y cuánta llega finalmente a los grifos de las casas es sectorizar las redes tanto como sea posible”.
Se trata de “dividir” en diferentes partes el municipio y “colocar equipos especializados para medir el caudal de agua o la presión de forma automática”.
Por ejemplo, las redes de abastecimiento de Cheles o Siruela tendrán dos zonas diferenciadas, mientras que en Hornachos o Herrera del Duque serán hasta cuatro sectores los que se crearán.
Esto facilitará la identificación de posibles fugas o averías y aportará información en tiempo real del volumen de agua consumida.
Con la calidad del agua es similar, ya que se instalarán 26 sensores digitales en los puntos de captación de pozos y embalses y en la salida de agua tratada de las potabilizadoras para “vigilar” que el agua “cumple con los parámetros adecuados para su consumo”.
“El objetivo final es avanzar en la digitalización y modernización de los sistemas de abastecimiento para aprovechar cada gota de agua, algo de vital importancia en periodos de escasez y de crisis climática como en el que nos encontramos”, concluye Buenavista.
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