BADAJOZ, 17 (EUROPA PRESS)
El delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Extremadura, Marcelino Núñez, ha avanzado que las previsiones para los próximos meses de abril, mayo y junio en la región indican que hay una mayor probabilidad de que la precipitación acumulada del trimestre sea normal o mayor que los valores de referencia.
También hay una mayor probabilidad de que la temperatura media de la primavera sea normal o más cálida que los valores de referencia, a la par que ha reconocido que se trata de una predicción estacional en la que tienen “menos pericia” que en la diaria o semanal que realizan y que, en todo caso y sin “querer lanzar las campanas al vuelo”, se trata de una “señal buena” la referida a las lluvias, puesto que quedan por “pescar” 150 litros, debido a que la precipitación media en Extremadura son unos 550 litros, entre 200 del invierno, 200 del otoño y 150 en la primavera.
Y es que, como ha explicado, en el balance hidrológico desde el pasado mes de octubre, comprendido entre las estaciones de otoño e invierno, la región ha registrado un “cierto” superávit, pero que son 150 litros los que “quedan por cazar” en primavera y “son muchos litros”, aunque “parece que la señal es que la cosa no vaya muy mal” y que las lluvias se sitúen en la media o por encima de la misma.
Así lo ha señalado Núñez en una comparecencia en la Delegación del Gobierno en la que ha presentado el balance climático de la pasada estación del invierno y las previsiones para la primavera, que comienza el lunes 20 de marzo a las 22,24 horas, a la vez que ha precisado respecto a este mes de marzo que, hasta el 16 de marzo, está siendo normal en cuanto a precipitaciones, situadas éstas por debajo de la media, y también en cuanto a las temperaturas.
De cara a los próximos días, este viernes 17 y el sábado 18 habrá intervalos nubosos, sin descartar alguna precipitación débil en el norte y con temperaturas en ligero descenso. Ya el domingo 19, el lunes 20 y el resto de la semana serán días poco nubosos, sin precipitaciones y con temperaturas en ligero ascenso.
UN INVIERNO HÚMEDO Y MUY CÁLIDO
En su intervención, Marcelino Núñez ha precisado en relación al pasado trimestre que ha sido húmedo en cuanto a las precipitaciones y muy cálido en temperaturas.
En concreto, las precipitaciones medias para toda la región durante el invierno han sido de 279,4 litros por metro cuadrado, superiores al valor de referencia para este trimestre que es de 156,3 litros por metro cuadrado, de modo que se ha dado, en promedio para toda Extremadura, un superávit de 123,1 litros por metro cuadrado.
De esta forma, en este trimestre las precipitaciones han representado un 179 por ciento del valor de referencia y ha sido el octavo más húmedo del periodo de referencia (1991-2020) en Extremadura, tras un diciembre de 2022 muy húmedo, y un enero y febrero de 2023 normales.
Asimismo, el balance de las precipitaciones acumuladas en lo que se lleva de año hidrológico desde octubre a febrero ha sido clasificado también como húmedo y, en concreto, se han registrado de media 417,1 milímetros, cuando la referencia es de 318,6.
Así, las precipitaciones registradas en el periodo citado han supuesto un superávit de 98,5 milímetros y la precipitación de lo que se lleva de año hidrológico 2022-2023 ha supuesto, por tanto, un 131 por ciento del valor de referencia.
TEMPERATURAS Y SITUACIONES NOTABLES
En cuanto a las temperaturas, en Extremadura la temperatura media del trimestre comprendido entre diciembre y febrero ha sido de 9,5 grados, mientras que la temperatura media de referencia es de 8,6 grados, lo que significa que se ha dado una anomalía positiva de 0,9 grados respecto al valor medio, que permite clasificarlo como muy cálido en cuanto a temperaturas, el sexto más cálido del periodo de referencia (1991-2020).
También en este caso el mes de diciembre marca la “tendencia” dado que ha sido extremadamente cálido, mientras que enero y febrero se clasifican como normales.
Por último, Marcelino Núñez se ha referido igualmente en su intervención a las situaciones más notables del invierno 2022-2023, como las precipitaciones continuas entre el 4 y el 15 del mes de diciembre en toda la región, y el paso lento de la borrasca Efraín, con río atmosférico asociado, y que generó lluvias muy cuantiosas los días 12 y 13, superándose los 100 milímetros en 24 horas en estaciones de comarcas diferentes que provocaron inundaciones.
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