El director de la Agencia Extremeña de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AEXCID), Ángel Calle, ha asistido este miércoles a la concentración realizada en la plaza de España de Mérida, con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas.
Al acto han asistido también la directora general de Acción Exterior, Rosa Balas, y el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, así como representantes de organizaciones y movimientos sociales, ONGD y sindicatos. En la puerta del consistorio, estudiantes del IES Albarregas han desplegado una pancarta reivindicando este derecho de las personas refugiadas.
“No es una cuestión de buenísmo –ha afirmado Ángel Calle– si no de cumplir con la legalidad internacional a la que los Estados miembros de la Unión Europea están obligados a cumplir”.
Dos modelos dentro de la UE son los que ha dibujado Ángel Calle. Por un lado, según ha explicado, “el de Italia, que cierra puertos ante la situación dramática de un barco que está a punto de zozobrar con 629 personas, incumpliendo la legalidad internacional”. Por el otro, “un Estado con un nuevo gobierno que asume el rol internacional que le corresponde”.
Calle se ha mostrado muy crítico con la actitud manifestada por el gobierno de Matteo Salvini, diciendo que “nadie pondría en duda que si estas personas, en vez de ser gente pobre, gente empobrecida, fuera en un yate con personas de clase media-alta, ningún puerto le cerraría las puertas”.
El responsable extremeño de Cooperación Internacional para el Desarrollo ha aplaudido el ofrecimiento de Francia para acoger a una parte de los refugiados llegados a España. Para él, “si la reacción del presidente Pedro Sánchez va a servir para desencadenar una solidaridad europea, bienvenido, objetivo cumplido”.
Este gesto, según Ángel Calle, va a poner a algunos estados europeos “frente a sus propias contradicciones” y ha recodado que el presidente de la Junta de Extremadura se puso desde el primer momento a disposición del Gobierno de España para acoger el número de refugiados acordado en el protocolo entre la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales y el Ministerio del Interior.
Para el director de la AEXCID, “el problema fundamental no es que sean refugiados, que han elegido una maleta para no elegir un ataúd; el problema de estos microbrotes xenófobos que estamos viendo –por cierto, pocos en nuestro país, según Calle– es que estas personas son pobres y eso les molesta”.
Del mismo modo, el responsable de la cooperación extremeña ha recordado que la Junta de Extremadura se puso a disposición del Gobierno central el 2 de septiembre de 2015 para colaborar en la llegada de refugiados, “siempre alineados con los movimientos sociales y organizaciones que trabajan de manera muy digna en nuestra región”.
CONCENTRACIÓN EN MÉRIDA
La concentración en las puertas del Ayuntamiento de Mérida ha sido apoyada por la Fundación Cepaim, el Comité Español de la Agencia de la ONU para los Refugiados UNHCR-ACNUR, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y la Asociación Cooperación por la Paz, y ha contado con el apoyo de la AEXCID, la Coordinadora Extremeña de ONGD (CONGDEX), en concreto su grupo de movilidad humana, y las organizaciones sindicales.
“La reacción ha llegado –ha manifestado Calle–, la sincronización ha llegado y podemos estar orgullosos de un Estado que responde a nada extraordinario: cumplir con la legalidad internacional”. A su vez, ha agradecido la presencia de jóvenes estudiantes en la concentración, “jóvenes de nuestra región que saben estar a la altura, con espíritu crítico”, según Calle, pues “la legalidad ya es uno de los símbolos de nuestro país en la Unión Europea”.
En representación de estos colectivos, Virginia Romo, coordinadora de la Fundación Cepaim de Mérida, ha apoyado la acogida de personas refugiadas “por humanidad”. “Mérida debe ser una ciudad acogedora. Las migraciones humanitarias deben ser uno de los temas que más nos tienen que preocupar porque una de cada cien personas en el mundo son refugiadas”, ha asegurado.
La Organización de las Naciones Unidas establece que el 20 de junio se conmemora el Día Mundial de las Personas Refugiadas, y constituye una expresión de solidaridad con las personas que han sido desarraigadas de sus hogares por la guerra o la persecución.
Desde la AEXCID se ha distribuido una bandera blanca a una decena de ayuntamientos, la FEMPEX, las Diputaciones de Cáceres y Badajoz y la sede del parlamento extremeño, con el fin de que visibilicen el compromiso institucional con este derecho para las personas refugiadas.
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