CÁCERES, 16 (EUROPA PRESS)
El partido animalista Pacma ha interpuesto una denuncia por maltrato animal contra la empresa Eulen que gestiona la perrera provincial ubicada en la finca Haza de la Concepción de Malpartida de Plasencia, propiedad de la Diputación de Cáceres pero explotada por la citada empresa.
Este centro cuenta ya con dos denuncias de este tipo por el trato que se le da a los aproximadamente 80 animales que se encuentran allí y que han sido documentadas por fotografías tomadas entre abril y comienzos de octubre de 2024, por una extrabajadora, en la que se pueden apreciar animales en los huesos, con heridas infectadas de gusanos, durmiendo entre sus propias diarreas, con estertores e incluso fallecidos.
Según ha denunciado Pacma en un comunicado de prensa este miércoles, la extrabajadora fue despedida después de tener la perrera conocimiento de que había realizado las mencionadas fotos y vídeos y se las había enviado a una asociación que habría interpuesto la primera denuncia en el mes de julio. Dicha denuncia trajo consigo una inspección del Seprona, que hasta la fecha no se habría materializado en ningún cambio respecto al estado de los animales.
La perrera de Malpartida de Plasencia, que fue puesta en concurso público en 2021, contaría actualmente con solo dos personas encargadas del cuidado de los 80 perros. Para las asociaciones implicadas en esta denuncia, “tan escasa cantidad de personal hace imposible ofrecer la atención mínima que los animales necesitan, tanto es así, que uno de los cuatro fallecimientos que se habrían producido, al menos, desde el mes de abril, fue consecuencia de una pelea”.
A la primera denuncia se suma ahora un segundo contencioso interpuesto por la extrabajadora, que está dispuesta a llegar hasta el fondo del asunto. Para ello, contará con la ayuda y personación en el caso del Refugio Ciudad Animal Brego, que solicitará este mismo miércoles medidas cautelarísimas para poder proceder al decomiso, al menos, de los animales en peor estado de salud mientras dure el procedimiento judicial.
Si bien la perrera y la asociación habrían llegado a un acuerdo inicial que permitiría a esta última llevarse a varios animales, finalmente desde la perrera se habrían negado por vía extrajudicial, según asegura Pacma, que pide que “la inspección de la perrera que mane de la nueva denuncia sea realizada por personal veterinario cualificado, y no por agentes del Seprona”.
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