El nuevo Plan de Acción para la Mejora del Ambiente Sonoro busca “mejorar la calidad de vida mitigando la contaminación acústica”
VITORIA, 27 (EUROPA PRESS)
El nuevo Plan de Acción para la Mejora del Ambiente Sonoro del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, que reducirá los niveles de contaminación acústica a los que están expuestos 14.000 ciudadanos, se marca, entre otros, el objetivo de que el 83% de la población tenga niveles de “zona tranquila” para el periodo nocturno, es decir, por debajo de los 50 decibelios.
La Junta de Gobierno Local de este viernes ha acordado la aprobación inicial del Plan de Acción para la Mejora del Ambiente sonoro de Vitoria- Gasteiz (PAMAS) 2024-2029, que viene a dar continuidad a las medidas contempladas en el anterior documento vigente entre los años 2019 y 2023, y que contempla medidas valoradas en casi medio millón de euros.
En rueda de prensa, la alcaldesa de Vitoria-Gasteiz, Maider Etxebarria, tras reconocer que es “prácticamente imposible solucionar al 100%” el problema de la contaminación acústica, ha recordado que hace un par de años ya alertaban de que el 9% de la ciudadanía vitoriana estaba expuesta a niveles de contaminación acústica”.
Por ello, ha destacado que desde el consistorio trabajan en proyectos para mejorar esta situación, entre los que ha destacado la habilitación de zonas 30 y supermanzanas para reducir el impacto del tráfico, la elaboración de un mapa estratégico del ruido o la concesión de ayudas para la insonorización de locales y viviendas.
A estas y otras medidas, ha dicho, se suman las acciones del nuevo PAMAS, con el que se busca “reducir el impacto sonoro en la población para, de esta manera, conseguir una Vitoria-Gasteiz más tranquila y más saludable”.
La alcaldesa ha indicado que el objetivo es “lograr que cerca de 14.000 personas sufran menos contaminación acústica y, por lo tanto, vean mejorado su bienestar y calidad de vida”. “Y así, avanzar en nuestra estrategia de diseñar una ciudad con menos ruido, más tranquila y más respetuosa con la salud de la ciudadanía”, ha añadido.
El Plan presenta una estrategia a cinco años, desde 2024 a 2028, con acciones a mantener en el tiempo que se irán adaptando. En este sentido, el PAMAS señala como reto lograr la reducción de los niveles de ruido que afecta a casi 14.000 vitorianas.
“Queremos rebajar del 4,4% al 3% el volumen de población expuesta a niveles superiores a los 55 decibelios. Esto beneficiará a unas 3.500 personas, ahora con niveles superiores”, ha explicado la alcaldesa.
El segundo gran objetivo del PAMAS, ha precisado, se orienta en lograr que un 83% de la población disponga de niveles de “zona tranquila” para el periodo nocturno. “Es decir, por debajo de los 50 decibelios, lo que beneficiará a 10.000 personas más”, ha apuntado.
Para alcanzar estos objetivos se trabajará en dos direcciones, desarrollando diferentes líneas de gestión como de actuación. La alcaldesa ha indicado que las actuaciones de gestión son necesarias para “un mejor aprovechamiento de los recursos y para que el plan funcione”.
Según ha avanzado, algunas de sus medidas prioritarias serán establecer un calendario de trabajo para la Mesa por la Mejora del Ambiente Sonoro, puesta en marcha de campañas de sensibilización y desarrollar un sistema de información.
En cuanto a las líneas de actuación, estas se refieren a las acciones para reducir y prevenir el ruido y preservar las zonas tranquilas. Entre sus medidas más relevantes figuran priorizar el mantenimiento de los pavimentos para reducir el ruido que emiten, actualizar el mapa del ruido de ocio y analizar la exposición al ruido de edificios municipales.
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