MADRID, 04 (SERVIMEDIA)
El sector de la construcción ha elegido a Vidacaixa para gestionar el plan de pensiones del sector, pionero en España, con el que se prevé mover unos 3.000 millones de euros en un plazo de 10 años y que afectará en el corto plazo a un millón de trabajadores por cuenta ajena y podrá hacerlo a más de 400.000 autónomos del sector.
Así lo confirmaron a Servimedia fuentes de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC), que cumple así sus previsiones tras cerrar el pasado 23 de junio con los sindicatos el reglamento del plan de pensiones y darse un margen de 10 días para elegir a la entidad gestora y presentar los documentos correspondientes para empezar cuanto antes las empresas a realizar las aportaciones.
VidaCaixa ha sido finalmente la entidad elegida entre las 14 que optaron a gestionar este plan de pensiones, tras realizar un proceso de selección compuesto por casi 1.000 variables pactadas por patronal y sindicatos. Las primeras aportaciones a este plan de pensiones empezarán a realizarse este mismo verano, en cuanto la gestora pueda tener todo su sistema adaptado.
El impulso de este tipo de plan de pensiones gracias a incentivos fiscales fue uno de los objetivos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en la reforma que emprendió el año pasado, en línea con la recomendación 16 del Pacto de Toledo y con las recomendaciones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef).
De esta manera, todos los trabajadores que formen parte del sector dispondrán de un plan de pensiones cuyas aportaciones por parte de la empresa estarán reguladas por el convenio colectivo. En el último acuerdo, patronal y sindicatos pactaron que, en 2022 y 2023, la contribución empresarial al plan de pensiones sería del 1% del importe de los conceptos salariales y en 2024 esta se elevaría 1,25%. No obstante, dado que el texto final no se aprobó hasta este año, el 1% correspondiente a 2022 se aportará en este ejercicio.
Además, se estableció una cláusula de garantía salarial, de manera que, si el valor medio de los incrementos interanuales del IPC entre enero de 2022 y diciembre de 2024 se situase entre el 10% y el 13%, se incrementarían con efectos de 1 de enero de 2025 las tablas salariales del año 2024, destinándose un 50% de ese exceso al plan de pensiones de los trabajadores dados de alta en la empresa en esa fecha. A partir del año 2025, CNC, CC.OO. y UGT tendrán que negociar las aportaciones en el próximo convenio general.
REGLAMENTO
Pese a que se llegó a un acuerdo antes del verano de 2022, la negociación de los detalles se ha extendido en el tiempo pues, según indicó a Servimedia el secretario general de CNC, Mariano Sanz, se intentó cuidar el texto lo máximo posible puesto que el sector era consciente de que la medida era pionera y de la atención que estaba recibiendo por parte de otros sectores.
Asimismo, señaló que para comenzar con las aportaciones no tendrán que esperar a que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones apruebe su propio reglamento para el desarrollo del fondo de los planes de pensiones colectivos impulsados por el ministro José Luis Escrivá, algo que esperan que ocurra “muy pronto”, ya que, en su propio texto, han previsto una posible adaptación si hubiera alguna incompatibilidad y se requiriese algún cambio.
El presidente de la CNC y de la Fundación Laboral de la Construcción (FLC), entidad paritaria en la que están representados CNC, CCOO y UGT, señaló que “en la construcción hemos demostrado la importancia de dialogar y tender puentes para buscar el bien común de empresarios y trabajadores, y hacer de nuestro sector un motor para la transformación y el progreso de España”.
Por su parte, el vicepresidente de la FLC, por parte de UGT, Mariano Hoya, recalcó que “volvemos a demostrar la madurez de nuestro diálogo social y el compromiso de todos con nuestros trabajadores, buscando mejoras directas en sus condiciones laborales”.
- Te recomendamos -