MADRID, 08 (SERVIMEDIA)
Uno de cada tres niños y niñas con discapacidad del mundo en edad de cursar Primaria no está escolarizado, según denunció este jueves Entreculturas con motivo del lanzamiento de su campaña anual ‘La silla roja’.
La iniciativa denuncia “los condicionantes que amenazan la vuelta al cole de hasta 244 millones de niños en todo el mundo” y este año presta especial atención a los que tienen discapacidad.
De hecho, las personas en esta situación representan el 15% de la población mundial y “se encuentran entre las más marginadas en cualquier comunidad”, subrayó Entreculturas. Esto incluye a las afectadas por la crisis de la covid-19, que les impactó “de forma desproporcionada”.
Agregó que los niños y niñas con discapacidad tienen cuatro veces más probabilidades de ser víctimas de cualquier tipo de violencia en todos los entornos -en el hogar, en la comunidad y en la escuela- y son casi tres veces más propensos a ser víctimas de violencia sexual, con las niñas en mayor riesgo.
Por otro lado, la desaceleración educativa provocada por la pandemia (para 2030, la Unesco estima 80 millones de niños más sin escolarizar) les perjudicará en mayor medida. Asimismo, explicó que las guerras afectan actualmente a más de 420 millones de niños y niñas en todo el mundo.
Cualquier menor tiene más posibilidades de dejar los estudios en contextos de migración, desplazamiento y refugio, pero la situación de las personas con discapacidad “se agrava aún más”, dado que carecen de la atención y de los recursos necesarios para mantener condiciones de vida aceptables.
“Tras las guerras de Siria y Ucrania y los conflictos en Yemen, Afganistán y Haití, muchas personas con discapacidad han huido de sus países en busca de protección y asilo”, y resaltó que las situaciones de emergencia también pueden provocar o agravar las discapacidades.
Otro grupo del que se ocupa la campaña son las niñas y mujeres que quedan fuera del sistema escolar. Antes de la pandemia, 130 millones de niñas de entre 6 y 17 años en todo el mundo no iban a la escuela. En la actualidad, se calcula que 20 millones de niñas más pueden no volver a clase. Todas ellas quedan expuestas a la explotación, el abuso y la extrema violencia, según advirtió Entreculturas.
En cuanto a las niñas y mujeres jóvenes con discapacidades, el colectivo enfrenta hasta 10 veces más violencia. Por todo ello, la ONG exigió a los estados profundizar la perspectiva de derechos humanos en la educación y reconocer la educación inclusiva como derecho humano; mejorar la formación de docentes y educadores en este ámbito, y favorecer la transparencia de las políticas públicas sobre discapacidad.
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