MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
El Tribunal Constitucional (TC) celebrará el 2 de octubre un Pleno monográfico sobre los recursos de Vox y el PP contra la reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que le impide realizar nombramientos discrecionales en la cúpula judicial estando caducado, y lo hará con dos propuestas contradictorias, una en la que la magistrada progresista María Luisa Balaguer aboga por avalar la reforma y otra del magistrado conservador César Tolosa que plantea tumbarla.
Según han informado fuentes jurídicas a Europa Press, Balaguer propone desestimar la impugnación lanzada por los de Santiago Abascal, mientras que Tolosa –que heredó el asunto del magistrado progresista Juan Antonio Xiol, ya fuera de la corte de garantías tras la última renovación parcial–, aboga por estimar el recurso firmado por los ‘populares’.
El primer recurso que entró al Constitucional, en abril de 2021, fue el de Vox. Y, poco después, ese mes de mayo, impugnó también el PP. Lo habitual es que el tribunal resuelva por orden de llegada, por lo que estaba previsto que primero se resolviera el recurso del partido de Abascal con una sentencia que habría marcado el camino al fallo sobre la impugnación del PP, tal y como ha ocurrido con la ley de la eutanasia.
Sin embargo, el TC ha informado este jueves de que ambos asuntos serán sometidos a una deliberación conjunta en un Pleno monográfico, “dada la complejidad del asunto y el interés general”.
Las fuentes consultadas no dudan de que se impondrá la propuesta de Balaguer, si bien apuntan que esta vez cabe esperar que los bloques se rompan y algún magistrado de la mayoría progresista (de 7 frente a 4) vote con sus colegas conservadores.
VETO A SUS FUNCIONES
Ambos partidos tachan de inconstitucional la modificación efectuada en marzo de 2021 a la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) para prohibir que un CGPJ en situación de interinidad (como el actual) cubra las vacantes generadas en los altos tribunales. La reforma legal pretendía empujar al PP a la mesa de negociaciones para renovar el órgano de gobierno de los jueces, cuyo mandato expiró el 4 de diciembre de 2018.
Sin embargo, la falta de avances para nombrar nuevos vocales propició que en julio de 2022 las Cortes Generales aprobaran una segunda reforma de la LOPJ para devolver al CGPJ su capacidad de proponer candidatos al TC y facilitar así una renovación parcial del Constitucional que se materializó el pasado enero provocando un vuelco hacia la actual mayoría progresista.
El pasado noviembre, antes de que el TC se renovara parcialmente, desde la corte de garantías ya se advertía de que, aunque ambas ponencias estaban muy avanzadas –la de Tolosa, que aún no formaba parte del tribunal, estaba entonces a cargo de Xiol–, aún tardarían en ir a Pleno para no interferir en “los procesos de negociación política o en los procesos electorales pendientes”.
Los recursos contra la reforma del CGPJ iban a ir a Pleno en el mes de junio, una vez superados los comicios autonómicos y municipales del 28 de mayo, pero el adelanto electoral al 23 de julio trastocó los planes de la corte de garantías para no interferir tampoco en estas votaciones, según informaron entonces fuentes jurídicas a Europa Press.
PANORAMA “DESOLADOR” EN EL SUPREMO
Cabe recordar que la imposibilidad legal de que el CGPJ haga nombramientos ha llevado al Tribunal Supremo (TS) al borde del colapso, con un total de 23 plazas sin cubrir, una situación que afecta ya a todas sus salas.
Durante la apertura del año judicial, celebrada el pasado 7 de septiembre, el presidente interino del TS, Francisco Marín Castán, calificó el panorama de “desolador”.
Del total de vacantes, se registran 2 en la Sala de lo Civil, 1 en la de lo Penal, 11 en la de lo Contencioso-Administrativo, 6 en la de lo Social y 3 en la de lo Militar.
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